Maneras prácticas de transmitir la fe a los hijos (Lc. 2, 22)

Oímos en el Evangelio de la Fiesta de la Sagrada Familia que: “los padres de Jesús le llevaron a Jerusalén , para presentarlo al Señor” (Lc 2, 22). De esas pocas palabras se pueden sacar unas maneras prácticas de transmitir la fe a los hijos, o como lo expresa S. Pablo: “Educadles en la doctrina y enseñanzas del Señor” (Ef 6, 4).

Viajando juntos, la Sagrada Familia muestra que 1) “Es necesario que los padres encuentren tiempo para estar con sus hijos y hablar con ellos. Los hijos son lo más importante: más importante que los negocios, que el trabajo, que el descanso. En esas conversaciones conviene escucharles con atención, esforzarse por comprenderlos, saber reconocer la parte de verdad -o la verdad entera- que pueda haber en algunas de sus rebeldías.” (S. Josemaría Escrivá, Es Cristo que pasa,27).

Los padres de Jesús cumplieron con la Ley de Moisés aunque la Virgen María no necesitaba purificación, 2) dando buen ejemplo de cómo se vive la fe. “Abrid la Escritura, y allí veréis que, cuando los padres fueron santos, también lo fueron los hijos. Cuando el Señor alaba a los padres o madres que se distinguieron por su fe y piedad, jamás se olvida de hacernos saber que los hijos y los servidores siguieron también sus huellas” (San Juan Vianney). “Aprended el temor de Dios; todo lo de más fluirá como de una fuente y vuestra casa se llenará de innumerables bienes” (S. Juan Crisóstomo, Hom. 20, sobre la Carta a los Efesios).

Iban al Templo juntos, por lo que se saca: 3) “Haced en común vuestras oraciones. Que cada uno de vosotros vaya a la iglesia y que en casa el marido pida cuenta a su mujer, y la mujer a su marido, de lo que allí se ha dicho o leído” (S. Juan Crisóstomo, Hom. 20, sobre la Carta a los Efesios).

Según el Papa Benedicto XVI, “La familia cristiana transmite la fe cuando 4) los padres enseñan a sus hijos a rezar y rezan con ellos[por ejemplo, al levantarse y al acostarse, bendiciendo la mesa] (cf. Familiaris consortio, 60);
5) cuando los acercan a los sacramentos y los van introduciendo en la vida de la Iglesia;
6) cuando todos se reúnen para leer la Biblia, iluminando la vida familiar a la luz de la fe y alabando a Dios como Padre. (Valencia, 9.7.06)

Eso es posible cuando, siguiendo el ejemplo de la Sagrada Familia, 7) se vive en harmonía familiar por caridad:

La fe y la esperanza se han de manifestar en el sosiego con que se enfocan los problemas, pequeños o grandes, que en todos los hogares ocurren, en la ilusión con que se persevera en el cumplimiento del propio deber. La caridad lo llenará así todo, y llevará a compartir las alegrías y los posibles sinsabores; a saber sonreír, olvidándose de las propias preocupaciones para atender a los demás; a escuchar al otro cónyuge o a los hijos, mostrándoles que de verdad se les quiere y comprende; a pasar por alto menudos roces sin importancia que el egoísmo podría convertir en montañas; a poner un gran amor en los pequeños servicios de que está compuesta la convivencia diaria” (S. Josemaría Escrivá, Es Cristo que pasa, 23).


Estos recursos podrían ayudar a los padres a crear un buen ambiente familiar cristiano:


A) www.LaFamilia.info, “Portal de la familia en Internet”

B) Estos libros de http://es.Catholic.net/biblioteca:
1) Catequesis en la edad preescolar
2) Creciendo con Jesús 1 (Maternal), 2 (Kinder), 3 (Transitorio), 4 (Preprimaria)
3) La Educación Integral en la Formación, Pastoral del niño de 6 a 12 años, Pastoral del Adolescente (11- 16 años)
4) El Adolescente y su Mundo
5) Vivir con un adolescente y no morir en el intento
6) El Jóven de Carácter

Oracion por la Familia de Bta. Madre Teresa de Calcuta

Padre Celestial, nos has dado un modelo de vida en la Sagrada Familia de Nazaret. Ayúdanos, Padre amado, a hacer de nuestra familia otro Nazaret, donde reine el amor, la paz y la alegría. Que sea profundamente contemplativa, intensamente eucarística y vibrante con alegría. Ayúdanos a permanecer unidos por la oración en familia en los momentos de gozo y de dolor. Enséñanos a ver a Jesucristo en los miembros de nuestra familia especialmente en los momentos de angustia.

Haz que el corazón de Jesús Eucaristía haga nuestros corazones mansos y humildes como el suyo y ayúdanos a sobrellevar las obligaciones familiares de una manera santa. Haz que nos amemos más y más unos a otros cada dia como Dios nos ama a cada uno de nosotros y a perdonarnos mutuamente nuestras faltas como todos perdonas nuestros pecados.

Ayúdanos, oh Padre amado, a recibir todo lo que nos das y a dar todo lo que quieres recibir con una gran sonrisa. Inmaculado Corazón de María, causa de nuestra alegría, ruega por nosotros. Santos ángel es de la Guarda permaneced a nuestro lado, guiadnos y protegednos.
Amén.

Pregunta del día [Puede dejar su respuesta en los comentarios]: ¿Cómo han sido sus experiencias transmitiendo la fe a sus hijos(por ejemplo, llevándoles a la iglesia) o recibiendo la fe de sus padres?

Mañana: Propósitos para el Año Nuevo, “El niño iba creciendo” (Lc 2, 40)

4 comentarios

  
Manuel
"¿Cómo han sido sus experiencias transmitiendo la fe a sus hijos(por ejemplo, llevándoles a la iglesia) o recibiendo la fe de sus padres?"
El ejemplo de una vida en paz y armonía es la mejor manera de transmitir la fe (evidentemente esto no es fácil) acompañado de oración personal (primero) y luego en común. Mis padres me transmitieron la fe igualmente, con su ejemplo, y aunque en ese momento yo fuí muy crítico con el caracter duro y autoritario de mi padre, luego he aprendido a valorar su cariño, su esfuerzo y el valor de la fe que nos transmitió. Quizás esto sea algo importante de la fe, más allá de las personas, lo que comunicas a tus hijos es algo que les va a servir a ellos incluso contra ti (si es necesario que te juzguen por equivocarte en tu vida). Un saludo.
30/12/08 6:50 PM
  
María Lourdes
Manuel, gracias por su reflexión sobre la importancia del ejemplo de los padres. Me recuerda una cita de S. Antonio de Padua: "En vano se esfuerza en propagar la doctrina cristiana quien la contradice con sus obras".

Además, su humilde reconocimiento de cómo aprendió a valorar a su padre son verdaderas palabras de ánimo para los momentos en que los padres tenemos que disciplinar a nuestros hijos aunque nos pese tener que hacerlo.

Creo que se debería de añadir a la lista de prácticas: 8) Corregir a los hijos y castigarlos con caridad y justicia cuando sea necesario. En un exámen de conciencia que se leyó en un servicio penitencial de adviento antes de las confesiones individuales me llamó la atención que se preguntó a los padres si corregían a sus hijos cuando era necesario o si habían sido negligentes en este deber. A veces se nos olvida que amar a los hijos no significa dejarles hacer lo que quieran como niños consentidos, sino guiarles hacia el bien aún cuando nos cuesta hacerlo, sufriendo que no nos comprendan y nos digan que no les queremos por castigarles, por ejemplo.
30/12/08 8:54 PM
  
Luis R.
Ha pasado tiempo, Maria Lourdes, pero muchas gracias por todas tus entradas.
Creo que son muy valiosas.
10/02/09 4:23 AM
  
María Lourdes
Luis R, me alegro por su comentario, que leo porque recibo todos los comentarios del blog. Además, veo que hay muchos que leen los artículos mucho tiempo después de que son publicados, o sea que la información que ha dejado en otros artículos mucho tiempo después de su publicación seguro que serán de provecho para alguien. Un saludo.
10/02/09 12:01 PM

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