El amor incomprendido de la mujer librada de siete demonios
La polinizadora en la foto 2 en esta página no suele cautivar por su belleza, ni tampoco la lagartija balear, otra polinizadora. ¿Quién se hubiera imaginado que el Señor hubiera encargado a esa lagartija la sobrevivencia de una planta en los islotes que rodean la isla de Menorca?
¿A quién se le hubiera ocurrido elegir a una mujer para anunciar la Resurrección de Cristo a los apóstoles en una sociedad que le negaba los derechos más fundamentales? Y no fue elegida la Inmaculada Virgen María, Madre de Dios, sino una a quien el Señor libró de siete demonios, según la Biblia, una cuyo amor no ha comprendido nunca bien el mundo.
Sólo podía ser el mismo Hijo de Dios el que elevara la dignidad de esa simple mujer, el que según el Evangelio del XVI Domingo de Tiempo Ordinario, al ver una multitud buscándole: “le dio lástima de ellos” (Mc. 6, 34) porque parecían ovejas sin pastor. Sólo Él podía dar sentido a la vida de una mujer despreciada e incomprendida no sólo en su tiempo sino a lo largo de los siglos, una mujer cuya conversión enseñó hasta a la gran Doctora de la Iglesia, Sta. Teresa de Jesús, como indican las siguientes citas.
“Era yo muy devota de la gloriosa Magdalena y muy muchas veces pensaba en su conversión, en especial cuando comulgaba, que como sabía estaba allí cierto el Señor dentro de mí, poníame a sus pies, pareciéndome no eran de desechar mis lágrimas. Y no sabía lo que decía, que harto hacía quien por sí me las consentía derramar, pues tan presto se me olvidaba aquel sentimiento. Y encomendábame a aquesta gloriosa Santa para que me alcanzase perdón.” (“Libro de la vida” 9, 2)
Ella supo seguir al Señor, olvidándose de sí misma.
“Diréis, hermanas, que cómo se podrá hacer esto [de llevar y nunca dejar la Cruz de Cristo], que si le vierais con los ojos del cuerpo en el tiempo que Su Majestad andaba en el mundo, que lo hicierais de buena gana y le mirarais siempre.
“-No lo creáis, que quien ahora no se quiere hacer un poquito de fuerza a recoger siquiera la vista para mirar dentro de sí a este Señor (que) lo puede hacer sin peligro, sino con tantito cuidado), muy menos se pusiera al pie de la cruz con la Magdalena, que veía la muerte al ojo. Mas ¡qué debía pasar la gloriosa Virgen y esta bendita Santa! ¡Qué de amenazas, qué de malas palabras y qué de encontrones, y qué descomedidas! Pues ¡con qué gente lo habían tan cortesana! Sí, lo era del infierno, que eran ministros del demonio. Por cierto que debía ser terrible cosa lo que pasaron; sino que, con otro dolor mayor, no sentirían el suyo.
“Así que, hermanas, no creáis erais para tan grandes trabajos, si no sois para cosas tan pocas. Ejercitándoos en ellas, podéis venir a otras mayores.” (“Camino de perfección”, 26, 8)
Uno podría pensar que quizás no sería tan incomprendida esta santa si hubiera sido más prudente, si hubiera mantenido su devoción a Cristo sólo en el ámbito privado de su corazón, lejos de las murmuraciones de la gente en el Calvario, escondida en el cenáculo como los apóstoles.
“¿Esconderse? - ¡Oh, que el amor de Dios, si de veras es amor, es imposible! Si no, mirad un San Pablo, una Magdalena: en tres días el uno comenzó a entenderse que estaba enfermo de amor; éste fue San Pablo. La Magdalena desde el primer día, ¡y cuán bien entendido! Que esto tiene, que hay más o menos; y así se da a entender como la fuerza que tiene el amor: si es poco, dase a entender poco; y si es mucho, mucho; mas poco o mucho, como haya amor de Dios, siempre se entiende.”("Camino de perfección” 40, 3)
Los que se buscan sólo a sí mismos no se dan cuenta de que encontrarse a uno mismo en la playa de la eternidad es como buscar el granito de arena de nuestra miseria en esa inmensidad pasajera mientras el Cielo nos rodea, abierto de par en par por Nuestro Señor, esperando sólo a que levantemos los ojos para verlo, como hizo Sta. María Magadalena al oírle al Señor llamarle por su nombre el primer Domingo de Pascua de Resurrección, aunque ese cariño del Señor le hacía sufrir más su ausencia:
“ Considero algunas veces cuando una como yo, por haberme el Señor dado esta luz, con tan tibia caridad y tan incierto el descanso verdadero por no lo haber merecido mis obras, siento tanto verme en este destierro muchas veces, ¿qué sería el sentimiento de los santos? ¿Qué debía de pasar San Pablo y la Magdalena y otros semejantes, en quien tan crecido estaba este fuego de amor de Dios? Debía ser un continuo martirio.” ("Libro de la vida", 21, 7)
Por eso, tras la gloria de ser elegida “Apóstol a los Apóstoles” y la Ascensión del Señor no volvió a su vida de pecado ni pensó en hacerse la primera femenista, 
ni causó ningún escándalo excepto el de que su vida penitente chocara contra las expectativas de su sociedad, dejando sus bienes por el Señor como hizo durante la vida pública de Cristo.
“Quienes de veras aman a Dios, todo lo bueno aman, todo lo bueno quieren, todo lo bueno favorecen, todo lo bueno loan, con los buenos se juntan siempre y los favorecen y defienden. No aman sino verdades y cosa que sea digna de amar. ¿Pensáis que es posible quien muy de veras ama a Dios amar vanidades? Ni puede, ni riquezas, ni cosas del mundo, de deleites, ni honras; ni tiene contiendas ni envidias. Todo porque no pretende otra cosa sino contentar al Amado. Andan muriendo porque los ame, y así ponen la vida en entender cómo le agradarán más.”("Camino de perfección” 40, 3)
Que Sta. María Magdalena nos alcance la gracia de comprender y poner en práctica un gran amor por el Señor como el suyo.
Preguntas del día [Puede dejar su respuesta en los comentarios]: ¿Qué le llama la atención del amor de Sta. María Magdalena por el Señor? ¿Por qué cree que ha sido tan incomprendido?
Mañana –Sta. Brígida de Suecia “le contaron todo (Mc. 6, 30)
29 comentarios
Mal comprendido y calumniado,por autores sin escrúpulos,que, inventando unos supuestos amoríos,han ensuciado, algo tan precioso como es el hecho, incontestable, de que ella,una pecadora,fué la primera en anunciar la Resurrecuón del Señor,ésa es la verdad.
Además ella nos enseña la relación amorosa personal,que es posible,e incluso,imprescindible,con el Señor,como tantos santos nos han testimoniado.
Y es que como expresa el viejo dicho :"el corazón tiene razones, que la razón no entiende"
El adulterio al que se refiere la Escritura queda definido perfectamente en la carta me parece, que de S. Santiago cuando dice: "adulteros, que queréis a Dios y al mundo al misma vez"; y de la prostitución, se puede decir tres cuartos de lo mismo. Y hoy la prostitución espiritual está muy, pero que muy extendida, en personas que visten como si sólo se movieran por amor a Dios y como consecuencia de ello al prójimo. Evidentemente, los resultados están a la vista. Y no quiero decir más del tema.
A quien conocía a Nuestro Señor, realmente es decir con los ojos de la fe, tal era la majestad y nobleza que irradiaba, le era imposible seguir pensando en cosas viles o en amores egoístas. El conocimiento de la humanidad de Cristo es simultánea con su Divinidad, de modo tal que nunca se confunde con el amor erotico. Profunda idiotez de esa tonta canción de Jesucristo super star "I don't know how to love him".
Respecto a Magdalena, el mundo no la conoció. Siempre tendremos la duda si es la mujer adultera del Evangelio, pero de lo que no tenemos duda es que dejó el cuerpo de muerte junto al sepulcro de Cristo, y que cuando el Señor le dijo: "No me retengas", dejó a Dios por Dios.
Seguro que por atender ella y otras mujeres a sus necesidades con tanta generosidad y al comparar su comportamiento con su propia cobardía (a excepción de S. Juan, pero él también huyó del huerto cuando arrestaron al Señor) sabrían ellos de sobra la clase de mujer que era Sta. María Magdalena.
Al paso de los años, me parece que los que no pueden soportar que haya un amor tan puro en el mundo (que deja al de ellos en su sitio), pintan una nube donde el Señor veía Su Luz. ¿No es maravilloso que es el Señor el que lee los corazones de los que le aman? Un saludo.
Siempre está antes que nada la historia del gran Amor de Dios por ella y por nosotros, que recibimos siempre antes y más del Señor, que nunca niega Su Amor. Ella es un gran ejemplo porque su respuesta al Señor está a nuestro alcance también si seguimos y buscamos al Señor con todo nuestro ser. Gracias por su reflexión.
Parte del problema es lo poco que se sabe de ella, como muy bien indica, sin saberse si es la mujer adúltera que bañó los pies de Jesús con sus lágrimas en casa del fariseo (como pensaba Sta. Teresa de Jesús) o que sea la hermana de Sta. Marta y S. Lázaro. No se dice qué pecados le perdonó el Señor. Aun así, ¿una vez pecadora siempre pecadora? ¡Cómo rompe estereotipos el Señor con esta santa!
Me gusta mucho su última frase, de que "dejó a Dios por Dios". ¡Qué dificil es dejar lo bueno por lo mejor! Al obedecer al Señor, demuestra la santa que le ama a Dios desinteresadamente, no por consuelo propio, aunque el Señor en Su bondad también le consoló revelándose a ella resucitado y llamándole por su nombre.
Le agradezco también su recomendación, y su comentario sobre el nombre de la santa. Hace tiempo un lector comentó (a un artículo del blog sobre el significado de los nombres de los doce apóstoles) el significado del nombre de la santa:
"Sobre María Magdalena - 'Magdala' podría derivar de la ciudad Magdala (que podría originar de Migdal-El 'torre de Dios' porque esa ciudad tenía una torre que la vigilaba) o como apodo 'perfumista' o 'mujer de cabellos ásperos'".Interesante, ¿no? Un saludo.
Ciñéndome a sus preguntas: quiero muchísimo a esta santa, de ella lo admiro todo. Me parece que valía lo indecible, porque siempre figura a la cabeza del grupo que cuidaba de la intendencia, por ejemplo. Y me llama la atención, y me edifica, su profundo y fiel agradecimiento: Jesús la ha curado, y ella responde con una nobleza femenina inmensa, sin temor alguno.
¿ Incomprendida ? Por desgracia sí, se la ha calumniado de muy diversas formas, para empezar: prostituta, amante, esposa... Pero su grandeza está ahí.
En una época en la que el testimonio de una mujer no valía en juicio y su consideración social era más o menos la de un niño, si todo hubiera sido una farsa o una invención a nadie en su sano juicio se le habría ocurrido poner como primeros testigos de un hecho tan insólito y extraordinario a un grupo de mujeres. Es más o menos como si alguien asegurase que un burro ha volado basándose en el testimonio de un niño.... absurdo.
También me parece que durante muchos años la Iglesia identificó a María Magdalena con la hermana de Lázaro y Marta. En este sentido hay algunas curiosidades que recuedan esa identificación, como por ejemplo el hecho de que las festividades de Santa Marta y de Santa María Magdalena se celebren solo con una semana de diferencia. Incluso, si se busca en Google "Santa Marta", la primera referencia que aparece es una ciudad de Colombia que se llama así, y que es capital del departamento de Magdalena...
Por otra parte, también me ha sorprendido siempre las analogías y similitudes en los dos relatos del Evangelio de Juan que narran la Resurrección de Jesús y la de Lázaro. En la Resurrección de Jesús (Juan 20, 11-16) aparece una María, llorando junto a un sepulcro, que se echa a los pies de Jesús creyendo que es el hortelano. En el relato de Lázaro (Juan 11, 28-34), también aparece una María que sale corriendo de la casa, haciendo así creer a los judíos que va a llorar al sepulcro, y después también llora y lamenta su tristeza y su desesperación junto a Jesús.... Son curiosas las similitudes. Podría tratarse de la misma mujer en ambos casos.
Veo que, al menos en este caso, no has entendido la exégesis del Evangelio, ni esos surcos tan derechos que Dios hace, que para algunos de nosotros nos parecen torcidos.
Esta mi exposición sobre la relacíon de entre Jesús y María la Magalena, con menos matices, ya es notoria aceptación por otras personas con sentido de la exegesis evangélica.
De cualquier forma nada hay en esta mi exposición que ponga en duda, ni la señoría de un Hombre Dios perdonando a la mujer pecadora; Ni menos menoscabe la enterza de una mujer que sabe arrepentirse de sus descarriós y pedir perdón a su amado que es Jesús.
Y por si la gente no conoce bien los Evangelios: allí fueron las referencias.
¿No habre herido en tí alguna vena feminista: No?
Piénsalo, y lee un poco más el Nuevo Testamento.
A mí me impresiona mucho tanto que las mujeres seguían a Jesús como que Jesús aceptaba que ellas ayudaran al Señor y a sus discípulos ofreciendo sus bienes. Todo con tanta generosidad, modestia y decoro que el evangelista no duda en nombrar algunas (entre ellas Sta. María Magdalena). No tenemos por qué preguntarnos si hubieramos sido capaces de hacer lo mismo en esos tiempos. En nuestras vidas, como dice Sta. Teresa de Jesús, podemos ver si somos fieles primero en las cosas pequeñas. Me alargué, pero supongo que no extraña ya a nadie que pase por aquí de vez en cuando.
Respecto a la posición de la Iglesia, creo que se solía leer el Evangelio de la mujer bañando de lágrimas los pies de Jesús en casa del fariseo en la fiesta de la santa, lo cual explicaría mucho la difusión de la idea de que son la misma mujer, pero no estoy muy segura. Hoy en día se suele asociar a la santa en la Iglesia con la aparición de Cristo Resucitado. Después de todo, allí aparece su nombre. Muchas gracias por sus aportaciones. Un saludo.
Estoy de acuerdo en que dejó referencias de la Biblia, pero las usó fuera de contexto y las interpretó para dejar un relato no muy fiel a los relatos del Evangelio. Esas hipótesis, por muy interesantes que le parezcan, no pegan con este blog.
Por cierto, me hace gracia la expresión "vena feminista". La verdad es que no me acuerdo de haberla oído antes. Un saludo y gracias por explicar su punto de vista.
¿Cómo sabes de mi exposición al respecto de este post, si no ha salido?
No obstante: Dime ¿porqué es un poco extravagante? Yo traduzco la exegesis del Evangelio y veo lo que veo. No es cuetión de base histórica. Es cuetión de exegesis. Cuando veo a una mujer con un pomo de alavastro en diferentes situaciones no me queda más remedio que asociarle en sus movimientos.
De cualquier forma nada hay en lo que he dicho- y que no ha aparecido en este blog- que dignifique tanto a la que perdona, Jesús, como a la mujer perdonada María la Magdalena.
¿Qué pasa que mi tésis en nueva? Bueno será cuestión de investigación; Y porqué no puede ser de originalidad. Lo original siempre choca. Ante esta siruación se dice:
¡Oye esto es nuevo; o es la primera vez que lo oigo! ¿Me lo explicas? Porque te aseguro que mis fuentes son bien dignas de fiabilidad.
Y lo dicho:-que como digo no aparece en este blog-: Mi expuesto: Nada tiene que ver con lo del Código D'Avinci.
Es más: A este Brown le tengo por un ignorante y blasfemo: por lo que se refiere a este tema de entre Jesús y María Magdalena. Y un especulador e ignorante por lo que se refiere a otros temas de la cuántica universal basada en número tales como el 6,6,6.
Lo siento Raúl no estáis al día en estos asuntos del arcano bíblico. Me doy por enterado.
De caulquier forma la exégesis bíblica tiene un texto fácil de leer, rutinario. Y otro en contexto que para muchos es secreto. Y para otros menos.
Insisto en que me parece que no tienen nada que ver con los textos evangélicos. Una cosa es la exégesis, y otra la invención, la fabulación y la manipulación de los textos.
Su último comentario fue borrado para no abrir polémica aquí respecto a otro tema. De todas formas, creo que Raúl (a quien dirigió el comentario) ya lo habrá leído porque era anterior al suyo. Le pido que no insista en el tema. Un saludo.
¡Feliz fiesta de Santiago Apóstol a usted y a todos los demás españoles! Pienso dedicarle un artículo al santo, aunque ya ve que voy un poco retrasada en el blog porque mi familia y yo nos estamos preparando para una mudanza, lo cual ha afectado mucho mi horario. Un saludo.
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