¿Se está produciendo un calentamiento global antropogénico catastrófico? –5

Comentario del libro: Steve Goreham, The Mad, Mad, Mad World of Climatism –Mankind and Climate Change Mania, New Lenox Books, New Lenox IL USA, 2012.

1. Rayos de sol, céfiros y combustible verde y frondoso

En el Capítulo 11, el más largo del libro, Goreham critica las políticas energéticas impulsadas por la ideología climatista.

Las fuentes “medievales” de energía renovable (sol, viento, leña, fuerza animal) fueron reemplazadas por hidrocarburos durante los últimos dos siglos porque estos últimos entregaban más potencia, eran más baratos y estaban disponibles cuando se los necesitaba. Ese reemplazo fue un factor crucial del desarrollo económico moderno. Las sociedades desarrolladas usan mucha energía per capita. Hoy muchos intelectuales de élite (Paul Ehrlich, Al Gore, el Club de Roma, etc.) propugnan una limitación del uso de energía. “¿Qué mejor forma de reducir el crecimiento energético que abrazar el climatismo? Si las emisiones de origen humano están destruyendo el clima de la Tierra, entonces el uso de carbón, petróleo y gas debe ser detenido. Además, la promoción de energía renovable ineficiente y costosa es un método excelente de retardar el uso global de energía” (p. 186), y por tanto retardar el desarrollo económico.

A pesar de más de 20 años de alboroto mediático y de la enorme ayuda financiera de los gobiernos, muchas predicciones sobre una masiva transición a la energía renovable han fallado estrepitosamente. De 1973 a 2009, la porción de los hidrocarburos en el suministro mundial de energía descendió apenas del 87% al 81% (un 6%); y casi todo su descenso se explica por el ascenso de la energía nuclear del 1% al 6% (un 5%). En 2009, las formas de energía solar, eólica y geotérmica (sumadas) representaron un 0,8% de la energía del mundo. Los biocombustibles y desechos representaron el 10,2%, pero la mayor parte de ese cantidad correspondió a leña, carbón vegetal y estiércol utilizados en países pobres. Sólo la décima parte de ese porcentaje (o sea, alrededor de un 1% de la energía mundial) correspondió a los biocombustibles “modernos”.

Las principales desventajas de la energía solar y la energía eólica son tres: son formas de energía diluida, intermitente y de alto costo. La densidad energética de la luz solar y el viento es baja. Una planta de generación de electricidad de 1.360 MW de potencia promedio entregada ocuparía 0,4 km2 para una planta de gas, 1,6 km2 para una planta de carbón, 4,2 km2 para una planta nuclear, 340 km2 para una planta eólica y 900 km2 para una planta solar. Por otra parte, debido a su carácter intermitente, la energía solar y la energía eólica no encajan bien en los actuales sistemas eléctricos de potencia. No pueden reemplazar a las centrales de “carga base” porque no son de bajo costo ni pueden operar las 24 horas; pero tampoco sirven en un rol de “seguimiento de carga” porque el pico de demanda es a menudo de noche, cuando no se cuenta con energía solar, y porque la energía eólica varía demasiado como para contar con ella para cubrir la demanda pico. “Hacia fines de 2010, Alemania había construido más de 20.000 turbinas eólicas y Dinamarca más de 5.000. Pero ninguna de ambas naciones ha sido capaz de cerrar ni una sola planta de energía basada en carbón” (p. 199). Además, el costo variable de la energía basada en carbón o gas natural es de 2-5 centavos de dólar por KW-hora, mucho menor que el costo de la energía eólica o solar. Por último, varios estudios de casos reales muestran que los sistemas de energía eólica no reducen significativamente las emisiones de CO2. Incluso desde el punto de vista climatista, la promoción a ultranza de la energía eólica es un gigantesco esfuerzo en vano (cf. p. 199).

Los gobiernos del mundo han abrazado con entusiasmo la promoción de los biocombustibles (etanol y biodiesel) para reducir las emisiones de CO2 de los sistemas de transporte, fijando metas muy ambiciosas para la sustitución del petróleo por biocombustibles y subsidiando fuertemente a estos últimos. Sin embargo, además de los grandes subsidios, los biocombustibles presentan otras desventajas importantes: A) Para producir la misma cantidad de energía que un litro de gasolina, se necesitan 4,5 litros de etanol. B) El biodiesel entrega más energía que el etanol, pero los cultivos de biodiesel tienen un bajo rendimiento por hectárea. Por lo tanto, la cantidad de tierra requerida para proveer cantidades significativas de etanol o biodiesel es enorme. La Unión Europea debería convertir un 70% de su tierra agrícola para proveer un 10% de sus necesidades energéticas. C) La producción de etanol requiere 40 veces más agua que la de gasolina; y la producción de biodiesel a partir de soja usa 268 veces más agua que la de gasolina. D) La demanda creciente de maíz y soja para biocombustibles causó la duplicación de los precios de esos productos en el período 2000-2010, poniendo en peligro la seguridad alimentaria de millones de personas pobres. E) Por último, la producción y el uso de biocombustibles contaminan el aire e incluso aumentan las emisiones de CO2. La hipótesis contraria se debió a un grave error de “contabilidad” que ya ha sido reconocido: los cultivos necesarios para producir biocombustibles sustituyen mucha vegetación que absorbería grandes cantidades de CO2. Cuando esta sustitución se toma en cuenta, los biocombustibles dejan de ser “neutrales respecto al carbono”. Incluso desde el punto de vista climatista, la promoción a ultranza de los biocombustibles es un gran error.

Los automóviles eléctricos tenían la mayor parte del mercado automotriz norteamericano a principios del siglo XX. En el siglo XXI el climatismo está impulsando un resurgimiento de los autos eléctricos; pero éstos todavía sufren las mismas desventajas importantes que causaron su desaparición hace un siglo: alcance corto, tiempo de carga largo, costo alto y poca vida útil de la batería. A pesar de la fanfarria de marketing y los incentivos gubernamentales, los autos eléctricos vendidos en los Estados Unidos en 2011 fueron unos 20.000, sobre un total de 13.000.000. “Incluso volúmenes de venta mayores no tendrán un efecto perceptible sobre las emisiones, dado que la mayor parte de la electricidad usada [por los autos eléctricos] es producida en plantas de energía que queman carbón o gas” (p. 214).

La sección titulada “Montañas de subsidios: la locura climática en Europa” (pp. 214-220) critica la falta de sentido económico del celo casi misionero con el que las naciones europeas promovieron la energía renovable en las últimas dos décadas.

La sección titulada “El mito del pico del petróleo” (pp. 220-222) recuerda muchas predicciones completamente fallidas sobre el próximo fin de las reservas de petróleo y muestra que éstas han crecido y siguen creciendo constantemente.

La sección titulada “La revolución del fracturamiento hidráulico [o fracking]” (pp. 222-226) afirma que el fracking está dando resultados espectaculares y tiene el potencial para entregar cantidades casi ilimitadas de gas y petróleo a precios asequibles. En los Estados Unidos, en los últimos 30 años, se han perforado más de 500.000 pozos usando la técnica del fracking y los casos de incidentes documentados de contaminación del agua son sólo dos, y sus causas son discutidas.

Goreham concluye el Capítulo 11 diciendo: “A todos nos gustaría creer que la energía renovable es la respuesta, pero no lo es. La revolución de la energía renovable propuesta por el climatismo es un espejismo. El mundo permanece abrumadoramente basado en combustibles de hidrocarburos. El enorme volumen de uso global de energía significa que los diluidos, intermitentes y costosos renovables serán incapaces de proveer una porción significativa del uso global de energía en las próximas décadas, si es que alguna vez lo serán. Pero la buena noticia es que la humanidad no se quedará sin fuentes energéticas de hidrocarburos en el corto plazo. Al contrario, la revolución del fracturamiento hidráulico promete siglos de suministro de gas natural y posiblemente petróleo, si el mundo puede sacudir las equivocadas garras de la locura climática.” (p. 226).

2. ¡Usted no puede hacer estas cosas!

En el Capítulo 12, el autor presenta unos cuantos ejemplos de comportamientos tontos inspirados por la ideología climatista. Mencionaré sólo tres de ellos.

Las cremaciones de cadáveres emiten muchas toneladas de CO2 por año. Una compañía australiana encontró una solución a este serio problema climático: un proceso de hidrólisis que disuelve un cuerpo en cuatro horas. La propaganda de la firma dice que la solución resultante puede ser usada para regar rosales (cf. p. 228).

Cada camello salvaje de Australia expulsa unos 45 kg de metano por año. Hay 1.200.000 camellos salvajes en Australia, lo cual constituye un problema climático casi tan serio como las emisiones de la cremación humana mundial. Una ley aprobada en Australia en 2011 aspira a la reducción de las emisiones de metano a través de la eliminación de las cabras, ciervos, cerdos y camellos salvajes. Se dispara a las pobres bestias desde helicópteros (cf. p. 231).

El Primer Ministro británico Tony Blair dijo en 2004 que todas las nuevas escuelas deberían ser modelos de desarrollo sostenible. Siguiendo la visión de Blair, una escuela de Londres construyó en 2010 un aula de “cero carbono”. Costó US$ 38.000 y no puede ser usada por los niños todo el año porque es enconadamente fría en invierno (cf. pp. 232-233). (Continuará).

Daniel Iglesias Grèzes

Nota: Las traducciones del inglés son mías.

12 comentarios

  
Franco
Daniel

Siguiendo esta interesantísima serie, esta vez debo comentar algo muy relacionado con el tema, más precisamente con los biocombustibles. Ya sabrás que un "ingrediente" de los biocombustibles(espero no equivocarme) es el potasio. Bien, no sé si por Uruguay llegó la noticia del proyecto Potasio Río Colorado en mi tierra la provincia de Mendoza, Argentina. Tal proyecto está(más bien estaba) a cargo de la minera brasileña Vale, para extraer potasio de un yacimiento enorme que supuestamente para el 2020 será el yacimiento de potasio más grande del mundo. Aunque la producción de biocombustibles es un uso minoritario, se produce un curiosa ironía al respecto. Es sabido que para extraer potasio, primero debe disolverse en agua a 99 grados centígrados. En este proyecto se esperaba usar 600.000 litros de agua, no sé si por segundo o minuto, y calentarla consumiendo la cifra de 1.000.000 m3 de gas por día. Misma cantidad que se consume en todo el territorio mendocino pero por mes, y hablamos de 1.700.000 habitantes en este momento. Es decir, para que los brasileños tengan, entre otras cosas, un poco de biocombustible para presuntamente ahorrar petróleo, nosotros deberíamos gastar cantidades absurdas de agua(con posible contaminación de ríos) y gas, que no es precisamente barato.

Y ni te cuento de todas las desventajas económicas que este proyecto causaría.
Saludos.

PD: En uno de los post, alguien(creo que gringo) se reía de la posibilidad de reemplazar el petróleo con uranio. Por mí no me preocupo. En Mendoza tenemos ambas cosas :)
16/05/14 3:27 AM
  
jorge
Hola Daniel

Nuevamente gracias por el post.

Eso de las fuentes medievales de energía renovable tiene un pequeño error de escala temporal.

Cristóbal Colón, en su viaje a la desconocida América, no tuvo otra alternativa que usar energía renovable, el soplo del viento sobre sus velas.

Y con el descubrimiento de América, gracias a un viaje a lo desconocido de más de un mes de duración, se inicia la era Moderna.

Esas fuentes renovables no son tan medievales, sino tan actuales como prehistóricas, pero todas en el fondo derivadas de la energía solar.

Pero los climatistas se "olvidan" que la renovable energía solar es en realidad energía NUCLEAR, que sus amigos de Greepeace tratan como fuera de restringir y desaparecer.

A nadie se le ocurriría construir un reactor termonuclear como fuente de energía abundante, barata y sobre todo de alta densidad y eficiencia, para enviarlo al espacio junto al Sol, o tal vez un poco más cerca, y utilizar la energía de dicho reactor a "distancia" a través del viento y de paneles fotovoltaicos....

Pero algo así es lo que quieren los climatistas y sus cómplices.


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DIG: Goreham escribe "medievales" entre comillas porque reconoce que está usando un cliché inexacto.
16/05/14 3:38 AM
  
jb
Gracias Daniel por esta serie. Hay una cosa que me preocupa más que nada, y es que en mi humilde entendimiento la Iglesia, de alguna forma u otra parece tragarse éste rollito. No sé si es porque no diferencia entre polución ecológica que es auténtica y hay que controlarla y el calentamiento o el cambio climático (depende) de los nuevos maltusianos. (ejemplo de esto las nuevas actitudes de algunos en la NASA).
Poco oigo del tal promotor del Fraude de Rio, preludio de Kioto, el canadiense Maurice Strong de la ONU y principal promotor de tal calamidad de gases biológicos. Éste tipo. con los impuestos de los canadienses levantó un templo de adoración a Gaia la Madre Tierra…. últimamente éste señor anda chupando en China de los impuestos del carbono. Un “New Ager de aupa” con un centro "Holístico• en Costa Rica dirigido por su mujer, y no digamos del otro canadiense David Suzuki, otro millonario a costa del miedo al carbono y las flatulencias de vacas y camellos.
Dios nos libre de tantos astutos y haga que la Iglesia se ocupe de nuestras almas y no del “carbón Tax”. La polución auténtica aparte, eso sí es problema.


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DIG: Por favor lee el sexto y último artículo de esta serie.
16/05/14 4:00 AM
  
Sonia S
Hola Daniel, comentaristas :-)

Daniel ... adhiendote a uno de los mitos mas temidos del liberalismo??

Entonces eso querra decir que no es tan desastroso el liberlismo no? :-)

saludo, buen debate

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DIG: Gracias, Sonia.

Se dice que "el enemigo de tu enemigo es tu amigo" (ja, ja).

Más en serio, "liberalismo" es un término con muchos significados, algunos de ellos compatibles con el cristianismo; por ejemplo, "liberalismo" como generosidad o como amor por la libertad.

Sin embargo, el liberalismo clásico (o doctrinario) es incompatible con el cristianismo por su individualismo radical (que lleva al racionalismo y el rechazo de la tradición) y por su absolutización de la libertad de elección, que lleva a la noción de autonomía moral absoluta del ser humano.

La libertad es un don de Dios muy valioso, pero dentro de un orden: en su indisoluble conexión con la verdad (Jesucristo: "La verdad os hará libres").
16/05/14 4:51 AM
  
Yo2
Daniel, el autor está desfasado en 2 puntos.
Los generadores eólicos han triplicado su capacidad de producción eléctrica en los últimos años, lo que reduce su coste por kw producido considerablemente, y se están explorando márgenes de viento que antes eran inutilizables... ya veremos en que acaba.

Por otro lado, está olvidando las plantas de biomasa. En realidad es más o menos una planta de carbón, sólo que lo que quema son residuos de otro tipo (en general desechos vegetales). Estas están funcionando bien, pero son más caras que las de carbón.

En el tema de las renovables mi opinion es que en vez de financiar su aplicación al público se tendría que financiar su investigación, y aplicarla cuando se consiga algo realmente eficiente.
Un saludo en la Fe
16/05/14 7:44 AM
  
santir
Si se pone en peligro la disponibilidad de energía barata, no sólo se daña la economía (que ya es grave) sino que se pone en peligro el sistema de libertades. La liberación de los sistemas esclavistas y de servidumbre se pudo llevar a la práctica tras la Revolución Industrial, donde el carbón sustituye a la fuerza muscular. Nadie conoce el futuro, pero un retroceso en la mecanización-automatización de la economía puede tener muy peligrosas consecuencias en este sentido. Por ejemplo, ya se ha propuesto en UK por algunos ecologistas la creación de cartillas de racionamiento energético (con otro nombre, claro).
16/05/14 12:57 PM
  
Antonio Lebeo
Hay que ser un matiz, interesante, Los estudios realizados en externalidades, es mayor en todas las fuentes de hidrocarburos, aunque existen planta de Gas con secuestro de carbono, éstas no están tan extendidas en su uso, por el costo de planta. El problema de las externalidades es un problema de mercado e institucional, pues ningún productor o consumidor paga estás externalidades. Por otro lado aunque los costos de inversión y planta, son más reducidos en hidroeléctricas y en eólicas. La única desventaja real de las renovables y eso dependiendo de factores geográficos, geológicos, de viento, de radiación; son que no generan tantos Mwh o Mw planta. Como los hidrocarburos, pero eso son solo las eólicas y solares, las hidroeléctricas y geotérmicas tienen con que competir a cualquier hidrocarburo, habría que analizar externalidades y factores de planta e inversión. Aún así las renovables nunca sustituirán a los hidrocarburos, pues la demanda es exponencial. A lo más que se aspira a nivel global para el año 2040 es que un 40% de la demanda global sea satisfecha por renovables. Mientras no se encuentre una energía que sustituya a los hidrocarburos e incluso a las renovables, el riego económico-polito y ambiental estará siempre latente.
16/05/14 7:23 PM
  
Antonio Lebeo
Ahora bien la contra cara de este articulo, puede ser el libro de J. Rifkin la tercera revolución Industrial.

Aunque futurista y con los problemas globales actuales, se ve muy díficil una "nueva" era industrial como la propuesta por Rifkin.

16/05/14 7:30 PM
  
Gerardo
Pues si, detrás de esto, esta el querer reducir la población.
Donde yo vivo, un canal de cable local produjo un anuncio donde salía una niña con bata de médica y con su estetoscopio, sentada en el suelo junto al globo terráqueo.
La niña le pregunto a la tierra ¿Qué tienes?
La tierra le respondió:
Estoy enferma, hay mucha gente.
Ese anuncio de solo verlo realmente da miedo, es diabólico.
¿En que se diferencia el nazismo y creer que los seres humanos es una enfermedad?
Los nazis llamaron al exterminio de los judíos; la solución final.
La similitud es tan grotesca que el anuncio terminaba diciendo la tierra:
Sabes que hay una solución.
16/05/14 9:13 PM
  
Jaume
Sólo una muestra de las patentes secuestradas de energía libre y limpia:
https://lahoradedespertar.wordpress.com/2011/12/15/energias-alternativas/

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DIG: Allí no se da ninguna información verificable, porque no se habla de ninguna patente en concreto.

Parece ser que la comunicación inalámbrica se desarrolló bastante, le gustara o no a J. P. Morgan.
16/05/14 11:01 PM
  
Santiago
No sé, a mi tanto el climatismo como su opuesto me dan la sensación de estar impregnados de más ideología que ciencia. Algunos de los datos del autor me parecen poco fiables, aunque quizá esté yo equivocado: ¿una planta de 900 km cuadrados para 1360 MW? En España hay plantas de 50MW en menos de 1 km cuadrado:
www.torresolenergy.com/TORRESOL/valle1-valle2-plants/en

Pero no me fiaba del porcentaje que da a las renovables (en España la hidroeléctrica, eólica y solar suman mas) pero el dato es exacto: www.iea.org/publications/freepublications/publication/KeyWorld2013.pdf

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DIG: 1) Lo de los 900 km2 surge de una extrapolación, naturalmente. Aún no hemos llegado a la insensatez de construir una planta de energía de 900 km2.

2) El rendimiento de las plantas solares suele ser muy bajo, del orden del 10%. Esto significa que una planta solar con capacidad teórica de 50 MW tiene una potencia entregada promedio de 5 MW, por ejemplo. El cálculo de Goreham tiene en cuenta este hecho capital.
17/05/14 12:03 AM
  
Hernán
Un periodista católico estadounidense, Michael Voris, habla sobre este tema.

https://www.youtube.com/watch?v=uMFAhW_ZmV8

Saludos
17/05/14 12:12 AM

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