La inmortalidad, ¿una mentira?

En estos últimos días y en el mismo diario, aunque de distintos autores, he encontrado la misma afirmación y con palabras casi idénticas; lo presentan -lo descalifican-, así: “ya se sabe que la eternidad [referida a la persona humana], la inmortalidad, es una mentira".

¿Cómo puede una persona que sostiene tal sinrazón seguir pretendiendo ser -y actuar- como persona; y esperar, además, que te traten como tal? Porque, ¿qué encierra tal aserto?

Encierra, nada más y nada menos, que la negación de lo que es la persona humana. Es decir y para que nos aclaremos: “reconvierte” a la persona en una vaca; la “reduce", se dé cuenta o no, al nivel de las vacas. Puede que, a tenor del nivel manifestado tan a las claras, los autores no hayan caído en ello: vamos, que ni se le haya ocurrido. Pero tal cual.

Porque, una de las “cualidades” o “potencias” o “facultades"que “adornan y especifican a la persona humana", es decir, la hacen “otra cosa” por encima totalmente de los animales -no faltan gentes que digan lo contrario: que por delante y por encima están los animales- es, precisamente, que está dotada de entendimiento y voluntad; potencias o facultades que son, de suyo, ESPIRITUAES -son INMATERIALES- y, por tanto, NUNCA fenecen, es decir, no se acaban: son INMORTALES; es decir: son ETERNAS. Como el alma. Como la misma persona.

Ya sé que admitir esto no está al alcance de cualquiera, en particular de quien rechaza la verdad de las cosas, y no la acepta; supongo que porque no se le ha ocurrido a ella que, a mayor abundamiento, se le ha ocurrido exactamente lo contrario; por tanto, la rechaza, venga de quien venga, la rechaza siempre que no comulgue con lo políticamente correcto, con la opinión dominante o dominadora, o con sus propias ocurrencias. Y así les va; y además con estos bueyes pretenden arar, y dar opinión, y escribir, y hacer “kultureta".

Porque estas cosas -la existencia del alma en el hombre, y sus facultades: todo ello de naturaleza espiritual e inmaterial-, ya las descubrieron los filósofos griegos -no todos, claro, sólo los mejores: Platón y Aristóteles, en concreto- cinco o cuatro siglos antes de Jesucristo. Y también, por si lo de Aristóteles y Platón se nos había pasado, nos lo ha revelado Dios mismo, y está recogido en la Biblia, y así nos lo enseña -o enseñaba hasta antesdeayer- incluso la Iglesia Católica.

Lo que no se entiende es que una vaca escriba; y lo haga, además, por algún motivo, por alguna finalidad. Y no se entiende porque, como nunca se ha visto que una vaca lo haga, se sigue que no puede hacerlo: es incapaz. Como está comprobado que no es inteligente; que no organiza entierros; que no se pone de rodillas y reza; que no construye iglesias ni cementerios; que no edita periódicos, ni hace música; que no deja herencias, etc. O sea: que no es persona.

Pero una persona sí hace esas cosas, y más; y, lógicamente, lo hace porque puede, porque está capacitada, porque le corresponde, porque le pertenece. Totalmente. Pero todo eso porque es espiritual y, en consecuencia, porque es inmortal. Si no se afirma esto, no se puede afirmar -menos aún, demostrar- lo anterior.

Reconozco que debe ser muy duro creerse vaca cuando no se es una vaca. Debe ser muy duro comprobar que uno actúa como si no fuese vaca y creerse que es una vaca: vamos, que no se cree ni lo que está haciendo ni lo que está diciendo. Y una situación de este tipo debe poner al borde, no solo de los nervios, que también, sino de la locura y/o de la esquizofrenia.

Así es como uno se cree capaz de catalogar la vida humana como un “sin sentido", como una “náusea”, como  un engaño vil,  o como una “nada".

Por cierto: otra cosa que no puede ser una vaca: ni loca, ni esquizofrénica; ni es capaz de enjuiciar su vida y la de los demás: ¡porque no es persona!

Hace unos años -como sesenta, y mejor antes incluso- estas cosas eran de cultura general; porque había cultura: ahora hay “kultura” e “ideologías", que matan todo pensamiento humano. Había una base cultural, que venía ya desde antes de Cristo -del mundo clásico,  como hemos dicho-, y que estaba confirmada y elevada por el “humus” católico; y esta cultura -auténtica, digna del hombre, porque la había creado el hombre desde su ser hombre y desde su relación con Dios- nos impedía soltar tamañas majaderías: ¡No hubiésemos salido de casa en una buena temporada, de pura vergüenza!

Esa cultura, más la Fe Católica fundada en la Revelación de Dios, que ni puede engañarse ni engañarnos, nos protegía no solo del ambiente contrario -que siempre lo ha habido-, sino muy especialmente de nosotros mismos: de las memeces a las que somos capaces de llegar y, a día de hoy, memeces a las que somos cada vez más proclives: por desasistidos, por dejados a nuestro antojo, que siempre es de muy poca calidad intelectual y moral, y/o por inoculados de la falsedad de las ideologías, que envenenan el alma y sus potencias.

Y esto solo tiene el remedio, para el que esté metido ahí, y caso de que quiera salir, de volver a las fuentes, de las que no debemos salir, ni de excursión: de la VERDAD, “la diga Agamenón o su porquero". ¡Cuánto más si nos la ha dicho Dios mismo, que es nuestro Padre, resellada con la sangre de su Hijo, y entregada a todos nosotros, en su Iglesia, por el Espíritu Santo!

Amén.

14 comentarios

  
Salmantino
"....nos protegía no solo del ambiente contrario -que siempre lo ha habido-, sino muy especialmente de nosotros mismos: de las memeces a las que somos capaces de llegar..." ¡Qué gran verdad! Alejados de Dios quedamos a nuestra merced y nos convertimos en unos memos.

Gran artículo padre. Gracias.




Gracias a tí. Reza por mí.
21/01/19 12:32 PM
  
El gato con botas
Del hecho de ser espiritual no entiendo que se siga el ser inmortal. Una aclaración, porfa.


Solo lo material es caduco; es decir, se acaba: tiene fecha de caducidad y no puede no tenerla. Lo espiritual, por el contrario -Dios, el alma humana, los ángeles- que no participan -no tienen, no son- de lo material, son inmortales por esencia.
En el caso del hombre, conocer y querer son actos espirituales, que "piden" facultades espirituales -entendimiento y voluntad-, que "piden" una potencia -el alma- espiritual por esencia. Mientras que si se niegan estas cosas, además de caer en una contradicción absoluta, pues se niega lo mismo que está uno ejerciendo, se queda sin explicación válida para la realidad del hombre, de la persona humana: de sus propios actos y de sus actos propios. Y, en el fondo o en el principio, de Dios mismo, que es así, así nos ha hecho. El "realismo filosófico" siempre lo ha sostenido, por demostrado: no podemos no conocer y no podemos no querer. Siempre lo estamos haciendo, conscientemente o no, lo reconozcamos o no.
Y Dios también nos lo ha dicho, por si acaso. Y cuenta con que actuemos como tales: porque nos jugamos la "Vida Eterna", la "nuestra", también cuando se la niega.
21/01/19 1:41 PM
  
maru
Qué gusto leer, escuchar estas cosas, P. Aberasturi!!! Se dicen, se proclaman tan poco.... y viene también que se las recuerden a uno....Gracias.
21/01/19 2:52 PM
  
Cuesta
Me gusta la metáfora de la vaca que me permite indroducir aquello tan popular: "Habló el buey y dijo MU" que eso y no otra cosa saben proferir los que niegan la inmortalidad. Yo que ya peino canas he podido comprobar que tales memeces brotan de personas que tienen pánico a la muerte y sobre todo al más allá y tratan de autoconvencerse que negando la realidad la pueden sortear. Pobrecitos, oremos por ellos
21/01/19 8:04 PM
  
javier dolid
Resulta increíble que el hombre, que es conocedor y admirador de tantas obras bellas, de tantos pensamientos profundos y admirables, y de tantas manifestaciones de toda índole, maravillosas y atractivas, que la persona humana es capaz de realizar, idear y expresar, pueda abrigar alguna duda sobre que tales capacidades de la persona humana pueda derivar de su naturaleza animal. ¿Es que las piedras tienen capacidad de de germinar y reproducirse? ¿Es que ,los animales tienen capacidad para actuar sobre su entorno para adecuar y mejorar sus formas de vida? Resulta tan increíble que sólo se puede explicar pro la proclividad a la necedad que acompaña a la naturaleza humana.
Gracias, Padre, por el contenido y el tono de su post, y por recordar cosas que debieran ser obvias si tuviéramos alguna capacidad para vislumbrar la la verdadera realidad en que estamos inmersos (en Dios vivimos, nos movemos y existimos) y que nuestros sentidos (adaptados para desenvolvernos en nuestra realidad virtual) nos impiden ver con claridad.
21/01/19 8:24 PM
  
María de las Nieves
Lo de la vaca me hizo reír y claro los animales tienen su lenguaje Mu , la vaca y su expresividad y son criaturas de Dios como las bacterias ,las plantas ,los animales y los hombres.
Los seres humanos por el Bautismo fuimos introducidos en la muerte y Resurrección de Jesucristo que nos ama y ha dado la vida para sacarnos de la muerte y llegar a la Fuente luz inmortal del Padre eterno
Y según la Revelación no sólo inmortalidad del alma que ya lo es ,
sino que nuestro cuerpo será resucitado así nos lo afirma la Sagrada Escritura .
Sino partimos de que somos corpóreos espirituales como nos enseña la Palabra de Dios revelada por Jesucristo podemos pensar en cualquier ideología o superstición que nos llevará a la mentira y al infierno de la sin salida.
El Cristiano propone y vive en Unión con Jesucristo ,hasta ser otro Cristo El Uno ,así que el pensamiento y sentimiento es variado ,pero no todo lleva a la Fuente .
Gracias Padre por desmontar las artimañas.
21/01/19 8:55 PM
  
Echenique
En la entrevista a Scálfari, no desmentida como Dios manda, Francisco negaba la inmortalidad del alma al sostener que las almas de los pecadores impenitentes recalcitrantes resultaba aniquilada en el instante de la muerte, sin ningún apoyo en las sagradas escrituras, que nos hablan de cielo e infierno como destino definitivo, pero no de aniquilación. Todavía sigue sin desmentirse esa entrevista. Ergo ..
21/01/19 9:16 PM
  
Alfonso
Me gustaría saber quien y donde hace tal aserto, de que la inmortalidad no existe.
Gracias



Está todo en el ABC, ed. Madrid
21/01/19 9:18 PM
  
El gato con botas
Gracias por la contestación y vaya por delante que creo por la fe en la inmortalidad de mi alma y en su bellísimo destino hacia Dios. Pero, filosóficamente hablando, las facultades espirituales y la potencia que subyace en ellas mueren con la persona, no veo la necesidad de transcendencia.



Sin las facultades espirituales y la potencia que las sostiene no hay trascendencia. El alma y sus potencias no mueren, como no muere la persona: una y otras, una vez creadas, están hechas para ser siempre. Por eso hay Vida Eterna: porque "podemos" tenerla, pues hemos sido creados "para siempre". Y el signo o la "calidad" de esa eternidad depende de nuestra vida presente: de nuestra respuesta de Fe y de Amor al Amor de Dios que se nos da total y gratuitamente en su Hijo.
La trascendencia de la persona la descubre la filosofía. Y nos lo confirma la Revelación.
22/01/19 12:09 PM
  
pedro de madrid
Padre, usted va directamente a la raíz del problema y si esa raíz se cercena, lo demás es nada de nada, es perder el tiempo, como lo quieren dar a entender, sigo creyendo en los novisimos




Haces muy bien en seguir creyendo. Y que aproveche!!!!
22/01/19 5:15 PM
  
Forestier
Pero si ahora los más ateos y escépticos de los expertos en robótica, anuncian que vamos a ser inmortales. Cosa que me alegra que ¡por fin! reconozcan la inmortalidad. Además, l "yo", la "conciencia", la posesión perfecta del objeto formal entre el pensar y lo pensado, es una experiencia interior de la realidad de lo inmaterial que "todos" tenemos, que es casi una experiencia empírica.
23/01/19 3:46 PM
  
Echenique
Echo de menos en el artículo la distinción entre la inmortalidad del alma y la mortalidad del cuerpo, que resucitará el último día para unirse, de forma definitiva, a su alma correspondiente, que sufre ansias por recuperarlo de forma gloriosa las almas que alcanzan el cielo. Quizás se podría tratar en un nuevo artículo. Hablar de los Novísimos nos ayuda a seguir en la lucha por unirnos con Dios. Militia est vita hóminis super terram.
23/01/19 6:31 PM
  
parisparis
NO PUEDO DECIR NADA. ME HA DEJADO SIN HABLA. MUCHAS GRACIAS. Y REZO



Agradezco muchísimo tus oraciones. Pues las necesito.
23/01/19 11:50 PM
  
Mariana
Padre:
Dígame por favor si estoy en lo cierto:
La filosofía realista tomista y Santo Tomás de Aquino explican que el cuerpo mortal se corrompe, así como se corrompe la materia y se separa del alma que es inmortal. Y cuando esto ocurre, el alma espiritual e inmortal permanece en estado de alma separada. Separada de qué? del cuerpo corruptible o descompuesto.
El alma en el momento en que el cuerpo muere, queda en estado de alma separada a la espera de reunirse nuevamente con su mismo cuerpo resucitado, (cuando resucite) lo que ocurrirá en la segunda venida de Nuestro Señor Jesucristo, cuando resucitaremos a ejemplo de la Resurrección de Cristo.
En esto difiere la resurrección de la transmigración de las almas, de la reencarnación que dicen puede reencarnarse en un pollo o en un elefante o en una reina egipcia de hace mil años.
Resurrección es muy diferente de reencarnación.
03/02/19 7:09 PM

Dejar un comentario



No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.