Vírgenes, advocaciones – Nuestra Señora de Knock (Irlanda)
“Nuestra Señora de Knock, Reina de Irlanda: Tú diste esperanza a tu pueblo en un momento de aflicción y le consolaste en su tristeza. Tú has inspirado a innumerables peregrinos a rezar con confianza a tu Hijo, recordando su promesa: Pedid y recibiréis, buscad y encontraréis
Ayúdame a recordar que todos somos peregrinos en el camino del Cielo.
Lléname de amor e interés hacia mis hermanos en Cristo, especialmente por aquellos que viven conmigo.
Confórtame cuando estoy enfermo, solo o deprimido.
Enséñame a participar con más reverencia en la Santa Misa.
Ruega por mí ahora y en la hora de mi muerte. Amén.
Nuestra Señora de Knock, ruega por nosotros“
Esta oración, dedicada a la Virgen María, en su advocación puramente irlandesa, de Knock, demanda a la Madre de Dios bienes espirituales y también bienes físicos (porque por eso los seres humanos estamos compuestos de cuerpo y alma)
Era el 21 de agosto de 1879 cuando María se apareció a un grupo de personas que acudieron cuando dos mujeres dijeron haber visto a la Virgen María. Llovía, pero aquellas 15 personas no dejaron de contemplar la escena que estaban viendo sus asombrados ojos de creyentes.