El primer Trienio de Germinans Germinabit

Germinans ha cumplido ya tres años y entra en el cuarto. Tres años de constancia en el crecimiento, son una señal evidente de determinación por parte de los impulsores del proyecto. Pero son también la evidencia de la fuerza propia del proyecto. La verdad es que mientras los instrumentos creados para combatir a Germinans han languidecido y finalmente muerto por falta de vigor (y con toda seguridad, también de vigencia); mientras así ocurría en el bando de nuestros oponentes, ¡curiosamente el oficial!, en esta otra orilla el proyecto ha ido en andas. A menudo los artículos que aportamos, han de esperar semanas en la nevera, porque se acumulan las colaboraciones. Ésa es la realidad germinante. Germinans ha dado con una sintonía que atrae cada vez a más hombres y mujeres de Iglesia, tanto clérigos y religiosos como seglares. ¡Algo tendrá el agua cuando la bendicen! ¡Y algo les pasa a las iglesias y eclesiásticos que abominan del agua bendita!

Son muchos los signos que nos indican que éste será un año determinante para esta porción de la Iglesia que es Germinans, y ojalá que para toda la Iglesia en Cataluña. El primer gran signo es la visita del Papa a Barcelona el próximo noviembre. A pesar de los ingentes esfuerzos de instrumentalización de la misma que están haciendo todos los que sientan cátedra de progreso en esta nuestra atormentada Iglesia, desde clérigos a seglares y hasta autoridades políticas, encabezados y batutados todos ellos por nuestro n. s. b. a. señor Cardenal: a pesar de todo esto, la visita del Papa tendrá un elevado valor para esta depauperada región eclesiástica.

Más signos de que este año será determinante para Germinans es el poder de catalización que ha ejercido la página a lo largo de este último año tanto en clérigos como en seglares, que coinciden en nuestra percepción y en nuestra vivencia de la Iglesia. A través de la sección Omnes dicamus nos llegan no sólo cartas al Directorio, sino también artículos, que estamos publicando para que la voz de Germinans sea cada vez más plural. A estas alturas podemos decir sin temor a equivocarnos, que Germinans se ha convertido en un movimiento de revitalización de la Iglesia en Cataluña. Loado sea el Señor.

Uno más: la Iglesia está sintiendo con una dureza extrema la necesidad de la crítica interna. Claro que ésta empaña la imagen de unidad entre todos los cristianos. Claro que enturbia el clima de paz y armonía. Pero sin crítica corremos el peligro de mantenernos unidos beatíficamente en la ignominia: y en ella hemos caído de bruces. No sólo en la ignominia, sino además en una profunda decadencia. Sobre los hombros del Santo Padre, responsable máximo de la Iglesia , está cayendo la petición de responsabilidades por parte de los enemigos de la Iglesia. ¿No será mejor que todos sus miembros nos sintamos corresponsables y tengamos el valor de criticar cuando toque y de acusar antes de que avance la gangrena? ¡Ya está bien de elogiar los ricos vestidos del rey de turno, cuando no hace sino mostrar sus vergüenzas con la mayor desvergüenza! También en la Iglesia necesitamos el niño que exclame: ¡el rey va desnudo!

Nos alegramos por tanto de haber asumido este duro papel de críticos, en vez de optar por la comodidad de seguir la clásica trilogía eclesiástica del buen vivir: bene esse cum priore, currant aquae, relinquere res taliter qualiter. (Para los que no estudiaron latín: 1, llevarse bien con el que manda; 2, que corran las aguas; 3, dejar las cosas tal y cual.) Con nuestra actitud nos hemos cerrado a cal y canto el camino a las prebendas. Porque para algo el epí-skopos es en latín un in-spector . Los recientes intentos de extorsión contra algunos miembros de Germinans no se han podido ocultar al cui prodest, so riesgo de quedar sin recompensa semejante hazaña (en castizo, fechoría), cosa totalmente inaudita. Por tanto el arjós epí-scopos (primer obispo-inspector) de Cataluña sabe perfectamente con quiénes no debe contar para que le auxilien en el gobierno (para nosotros, desgobierno) de la Iglesia. ¿Está claro que no es Germinans la plataforma desde la que promocionarse? Pero he ahí que para no contaminarse, al menos coram populo , el cui prodest ha de abstenerse de beber de una fuente tan contaminada.

Y ya que hemos puesto nuestras máximas esperanzas en la visita seguro que pastoral de Benedicto XVI a Barcelona, estamos atentos a las maniobras de nuestro cardenal para que no se le escape de las manos el fruto que de ella espera obtener. En primer lugar, el cardenal Sistach ha conseguido elevar su cotización política en muchos enteros, y tendrá su merecido. A los políticos en el poder, todos ellos enemigos declarados de la Iglesia , les ha puesto en la boca la mejor golosina con que jamás hubiesen soñado. Sea cual sea la intención del Papa, y sean cuales sean sus palabras, tienen garantizada la gran foto: el Sumo Pontífice proclamando urbi et orbi la grandeza y singularidad de Cataluña y de la catalanidad, representadas por su icono más universalmente conocido: el templo nada menos que expiatorio de la Sagrada Familia. Esta hazaña le valdrá a Sistach más que los Juegos Olímpicos a Maragall.

¿Y el aspecto pastoral de la visita? Por lo que sabemos hasta el momento, el cardenal, con la inestimable ayuda de su nuevo aliado Cañizares, está haciendo ya todo lo posible para que quede en caldo de borrajas. Por lo pronto se dice que ha puesto a un eximio representante de lo peor de la Compañía , al padre Enric Puig, la cabeza más visible del progresismo jesuítico en Cataluña, al frente de la comisión encargada de encandilar al Papa de modo que llegue y se marche encantado de las maravillas pastorales que le ofrecerá la diócesis. Ya están en marcha las artes de encantamiento para darle color a la grisura, vitalidad a lo mustio y sabor a lo rancio. Gran ingeniería de imagen, todo muy creativo.

Pero esta información no ha visto todavía la luz y circula exclusivamente en las oscuras alas del rumor. Tal como de la visita del Papa a Santiago de Compostela lo sabemos todo, porque es una visita transparente, de la visita a Barcelona estamos totalmente a oscuras. ¿Por qué? Pues primero y ante todo porque hay voluntad de instrumentalizar políticamente esta visita. Voluntad abanderada por el Cardenal Luis Martínez Sistach y secundada por el Cardenal Bertone, que ha corrido a entrevistarse con el presidente de la Generalidad y con los presidentes de Convergencia y del PP, mientras “ la Iglesia ” está totalmente a oscuras. A no ser que “Iglesia Iglesia” en Cataluña lo sean tan sólo Sistach y sus muchachos. La oscuridad y el tejemaneje político son muy malos presagios. ¿Por qué tanto secretismo? ¿Por sectarismo? A ver si ahora resultará que no se conforman con “impresionar” al Papa. ¿Adivina alguien por dónde irán las sorpresas?

Tiene razón en preguntarse el articulista de Religión Confidencial: ¿A dónde vendrá el Papa?

Más de un observador avezado se pregunta si la visita del Papa es a España, a Barcelona y a Santiago de Compostela, a Santiago de Compostela y a Barcelona o si será una visita a Cataluña y Galicia o a España. ¿Y por qué se hace esas preguntas el lector avezado? Pues sencillamente porque hay quien está manejando magistralmente el juego de la confusión. ¿En beneficio de la Iglesia ? No, en beneficio propio.

El Directorio de Mayo Floreal
de Germinans Germinabit