Liturgia viva

Artículo publicado ayer en el Diario Ideal, edición de Jaén, página 33.

Muchas personas se alejan de la Iglesia porque no entienden los actos de la liturgia de la Iglesia Católica; otras desearían una Eucaristía más corta, con unas homilías más entendibles y con una mejor participación de los laicos en la celebración litúrgica.

Es unos casos u otros, siempre existe un denominador común: falta la fe necesaria para reconocer los misterios de Dios a través de las palabras y los gestos que la liturgia utiliza en su desarrollo con el Pueblo de Dios reunido cada domingo Día del Señor.

Durante los días 19 al 21 habrá una reunión en León muy importante. Es la asamblea de las jornadas nacionales de liturgia. El lema de esas fechas es: Retos y esperanzas de la celebración litúrgica. Se apoyan en una frase del Papa Benedicto XVI: “El valor y la validez de la renovación litúrgica, puesta en marcha a partir del Concilio Ecuménico Vaticano II tiene aún riquezas no descubiertas del todo.”

Los temas que se hablarán serán los siguiente: La Iglesia local se manifiesta en la celebración litúrgica; el sentido del misterio y la participación fructuosa; el ministerio de la presidencia, celebrar en comunión con la Iglesia; el equipo de animación litúrgica y la preparación de las celebraciones; la Palabra de Dios en la liturgia, alimento de fe; la belleza y el arte de los objetos y de las vestiduras litúrgicas; el alcance pastoral de las vestiduras litúrgicas; la homilía al servicio de la Palabra de Dios y de las necesidades de los fieles; dignidad y funcionalidad del espacio litúrgico; y la función de los coros en la celebración litúrgica.

Según observamos se hace un detallado recorrido por todos los aspectos de la Liturgia de la Iglesia, centrada de modo singular en la celebración del sacramento de la Eucaristía, centro y cumbre de la vida cristiana.

Los diversos ponentes y conferenciantes son obispos, sacerdotes y profesores de Sagrada Liturgia de centros docentes de la Iglesia. Todos tienen una larga experiencia en esta parte de la ciencia sagrada.

Suponemos que todas las jornadas irán buscando el aspecto intelectual, el pastoral y el práctico para que la mayoría de las ideas alumbradas puedan pasar a la operatividad de las comunidades parroquiales con el fin de que los cristianos y los sacerdotes vivamos más hondamente la riqueza de los misterios del Señor expresados en ritos, gestos, palabras y símbolos, y formemos comunidades vivas, donde cada domingo al reunirnos a celebrar la Eucaristía estemos pendientes siempre de lo que el Señor nos dice en su Palabra y nos comunica cuando comemos su Cuerpo y Sangre al comulgar en la Misa.

Llenos del Señor podremos convencer, desde la fe y la participación, a los demás que la Eucaristía no es un rollo insoportable, sino la expresión viva del Misterio Pascual del Señor sin cuya participación podremos vivir como cristianos.

Tomás de la Torre Lendínez

3 comentarios

  
ricardo
Esas personas que "no entienden", no tienen Fe, y sin ella la Sta Misa es un rollo.
Para los que "no entienden" recomiendo la misa en latín, con sacerdote de cara a Dios, con el máximo esplendor posible, y de rodillas la mayor parte del tiempo.
Cuantas mas genuflexiones delante del Stmo, mejor.
Asi pueden llegar a vislumbrar algo, pero en una misa progre desde luego que no.
18/10/10 9:59 AM
  
Jerico
Pues si no entienden y la haces en latín...
18/10/10 8:17 PM
  
Fray Eusebio de Lugo O.S.H.
Efectivamente, es imposible que puedan entender algo de la Misa sin Fe católica. Desgraciadamente, esa Fe ya no se predica, porque los encargados de ello la han perdido hace ya mucho tiempo. No hay más que ver cómo celebran la mayor parte, para sospechar que ya no creen que están ofreciendo el sacrificio del Calvario, como bien sabía el santo P.Pío. Tampoco parecen muy conscientes de la presencia real perpetua de N.S. en el sagrario, corazón de nuestros templos, como lo era en el de Jerusalén.
La mayor parte de los liturgistas están convencidos de que los ritos, textos y ceremonias deben ser breves, concisos, simples, claros y fáciles de entender por todo el mundo. Con ello manifiestan que no han entendido nada de la entraña más profunda de la Liturgia. Ésta es reflejo de la Liturgia que en las eternas moradas se celebra perpetuamente, y que el Espíritu Santo se ha dignado traducir en todo un universo de signos sensibles concatenados, que forman cada uno de los ritos tradicionales de Oriente y Occidente. En éstos, lo mismo que en la Sagradas Escrituras, ha escondido Dios una infinidad de misteriosos significados y operaciones espirituales, que sólo revela poco a poco, en la medida en que el estado espiritual del que asiste o celebra lo permite. Entiéndase que me estoy refiriendo en primer lugar a la celebración solemne y cantada del Oficio Divino y Misa Conventual en el Coro, así como los sacramentos en su forma tradicional. Tanto clérigos como laicos no participan de ese cielo en la tierra principalmente a través de la comprensión intelectual, sino sobre todo con Fe, amor, devoción y verdadero espíritu de piedad, estimulado por la belleza que les entra por cada uno de los sentidos materiales o espirituales. La comprensión intelectual es importante, pero no puede pretender desplazar los elementos antedichos, que una mayoría de cristianos podrá aprehender mucho más fácilmente.

Quieren brevedad, mientras que la prolongación temporal siempre ha sido una característica del culto tradicional, primero como sacrificio a Dios, Señor del tiempo, y también porque el alma necesita ir calentándose poco a poco hasta alcanzar la temperatura espiritual de serafines que asisten invisiblemente a las liturgias de la Tierra.
18/10/10 9:09 PM

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