La denuncia del autor del «El exorcista» contra la U. de Georgetown está bien fundada según la Santa Sede
El 4 de abril, Peter Blatty, autor de la famosa novela «El Exorcista» y antiguo alumno de la Universidad Jesuita de Georgetown recibía comunicación del arzobispo Angelo Vincenzo Zani, Secretario de la Congregación para la Educación Católica:
“Sus comunicaciones a este dicasterio sobre el asunto de la Universidad de Georgetown … constituyen una denuncia bien fundada. Nuestra congregación está tomando el tema en serio y cooperará con la Compañía de Jesús en este sentido.”
Peter Blatty se hartó hace dos años e inició un proceso canónico contra su antigua universidad para que o bien volviese a ser católica o bien abandonase el calificativo de católica y jesuita y así dejaba de engañar a la gente: «los escándalos son demasiados para ignorarlos por más tiempo». El detonante fue entrega de diplomas a la ‘ministra de sanidad’ –Secretaria de Sanidad y Servicios Humanos, Kathleen Sebelius –, una autodenominada católica que se jacta de ir contra las enseñanzas de la Iglesia respecto a la vida, al aborto, la anticoncepción o el matrimonio antinatural.
La negativa a cumplir con la Ex corde Ecclesiae y el escándalo a los fieles, estaban en la raíz de la denuncia. Quien tenía que actuar no actuaba. En lugar de sólo quejarse se puso en marcha:
Muchos creen que para hacer verdaderamente católica a Georgetown hay que girar hacia atrás las manecillas del reloj y de alguna manera limitar su propia naturaleza como universidad, como si la noción de ‘católica’ y ‘universidad’ fuese novedad, o una inherentemente contradicción. Por el contrario, hacer que Georgetown sea ‘católica’ es avanzar el reloj, ¡es convertir la Universidad en algo mejor de lo que es! Por supuesto, siempre hay quienes tienen miedo al cambio, quienes carecen de visión. Es posible que necesiten dejar paso y echarse al costado.
Juan Pablo II exhortó a todos a conservar para la Iglesia los lugares más altos de nuestra cultura: las universidades. […] Todos hemos sido negligentes durante demasiado tiempo: los laicos, el clero y también los obispos.
La petición firmada por Blatty y dos mil más llegó al Vaticano en septiembre. La respuesta es más que un simple acuse de recibo, ya que la califica técnicamente como bien fundada.
Blatty se muestra «profundamente satisfecho» y ha demostrado que no se va a conformar con palabras bonitas: «todavía hay mucho trabajo por hacer, y yo les prometo que vamos a perseverar». No me atrevo a ser muy optimista, pero reconozco que es más de lo que yo esperaba. Quitando el precedente de la actuación valiente y ejemplar del Cardenal Cipriani respecto a la ex Pontificia Universidad Católica del Perú, en estas situaciones hay tantos intereses creados que muchas veces la verdad, la justicia y la defensa de los fieles se convierten en aspectos secundarios.
Desde hace dos años sigo con interés el proceso. Si termina bien se abren inexploradas vías para que los fieles podamos defender nuestros derechos.
22 comentarios
Está bien, pero vamos, quizás allá para el año 2045 se vea algún cambio real. Antes, lo dudo. Ojalá me equivoque
Pues yo creo más bien este otro comentario:
Comentario de Mª Virginia
Pues a empezar a redactar prolijamente las denuncias contra las Universidades pseudocatólicas de nuestros países...
Y este otro:
Comentario de Fernando
Se abre el melón.
La paciencia ya se ha acabado. Fin. El escándalo de los jesuítas es inaceptable. Y muchos centros con el falso nombre de católico ya tienen los días contados.
Vuelvo a decir: ojalá me equivoque.
Es como si algunos desearan repetir 1773.
No olvidemos que Georgetown fue fundada tras la disolucion y sirvió como refugio a varios ex jesuitas estadounidenses, de hecho cuando se restaura la Compañia en 1814, los jesuitas supervivientes pudieron volver a restablecer la Compañia. Lo que no fue posible en otros paises.
En ese sentido Georgetown es todo un símbolo, no es una Universidad cualquiera.
El calificativo de católico en la práctica no pasa de ser mucho más que una inspiración de fondo de "humanismo cristiano" (término un poco ambiguo) y poco más.
Difícilmente de estos centros saldrán vocaciones al sacerdocio o al apostolado seglar o a formar familias cristianas.
Gracias amplias a Mr Blatty, tanto por este ejemplo, como por su novela El Exorcista. Mucho se mencionó que estaba basada en hechos reales, cosa que yo admito pues hasta la película es muy seria y coincide con las prácticas eclesiales en caso de 'posesión'. Posteriormente a esa película, ha habido cantidad de otras, tratando de igualar su 'éxito' económico, pero no dejan de ser burdas y hasta ridículas copias.
Ser católico y no parecerlo es ser falso. Ya basta de mentiras. Lo digo por mí, en lo que me toca.
Y este problema aparece cuando no se sabe comprender hasta cuándo y cómo se debe de frenar el poder del mundo por unos u otros generado por una parte.
Y por otra que estos en atención a esos poderes de mundo adquiridos, suelen confundirse en esa llamada "Teología de Liberación". Y no entienden que el verdadero templo de Dios, libre del mundanal progresismo, se encuentra más en el profundo interior del hombre que en la política del mundo.
-Síndrome de Rio Kwai. Que tanto traiciona y pone al descubierto el orgullo del hombre.
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