Los horarios de misas del cura de pueblo: entre pilates y el aula de costura
He de reconocer que tengo unos horarios de misas de lo más peculiar. Cada día, uno distinto, cada pueblo, una necesidad.
Al llegar a mis pueblos decidí celebrar misa cada día en un pueblo. Facilito. Dos días en cada sitio y el mismo horario. Je. Eso me creía yo.
Propuse en La Serna celebrar los miércoles. Los miércoles, no, por Dios, que tenemos el aula de costura. Vale. ¿El jueves? Mejor el jueves. ¿A las seis, que las tardes de invierno son cortas? Vale a las seis.
Braojos entonces lunes y miércoles. Y claro, también a las seis. No puede ser. ¿Cómo que no puede ser? Los lunes tenemos aula de adultos y no salimos hasta las seis y media. Perfecto. Pues entonces a las seis y media. Y ya el miércoles a la misma hora, también a las seis y media. El miércoles no. ¿Cómo que no? Es que a las seis y media tenemos pilates… Muy bien. Lunes seis y media y miércoles a las seis.
¿La adoración más prolongada al Santísimo la ponemos un par de sábados al mes a las ocho de la tarde? Mejor un poco más tarde, que es el día de la informática.
Los viernes celebro en una residencia de mayores en Buitrago. En principio a las diez de la mañana. Hemos tenido que atrasar quince minutos porque si no andamos demasiado justos con la hora del desayuno.
Comencé a celebrar en La Serna los sábados a las diez de la mañana. Unas religiosas que colaboran en la pastoral me pidieron si podría celebrar el lunes por la mañana. Sin problemas. A las diez, como el sábado. No. A las nueve y media, que a las diez empezamos en Cáritas. Vale. Nueve y media, en principio, porque si hay cosas excepcionales todavía hay algún cambio.
Me dirán que si esto es aburrido. Para nada.
Aburrido lo de ser párroco en Madrid, celebrando año tras año a las siete y media de la mañana y a las siete y media de la tarde. Lo de los pueblos es mucho más entretenido. Porque además de lo ya narrado, luego tenemos otras variantes.
Los domingos el horario es fijo, aunque con excepciones: Gascones a las once, La Serna a las doce y Braojos a la una. Pero… Si es fiesta en algún pueblo, entonces se celebra misa a las 13 h. y se reajustan los otros. Y a diario es lo que he contado, pero pueden darse excepciones, por ejemplo, algún entierro o algún acto excepcional en la diócesis o la vicaría, en cuyo caso quizá haya que modificar un día el horario o incluso suprimir la misa. O se hace imprescindible suplir a un compañero en una fiesta o un sepelio, así que no hay más remedio que informar de que mañana no hay misa porque es la fiesta de A. o hay un entierro en B. y es lo primero. O tenemos que modificar el horario porque hay un acto en…
Por eso cuando me preguntan por el horario de misas, digo que los domingos fijos salvo alguna excepción, y los laborables eso salvo que… Y tan entretenidos.
En resumen, que estos son mis horarios habituales:
HORARIOS HABITUALES
Lunes. 9:30 La Serna. Santa misa
Braojos. 18:30 h. Santa misa
Miércoles. Braojos. 17:30 h. Exposición y rosario. 18 h. Santa misa
Jueves. La Serna. 17:30 h. Exposición y rosario. 18 h. Santa misa
Viernes. Residencia Miralrío. Buitrago. 10:15 h. Santa misa
Sábado. La Serna. 10 h. Santa misa
Domingos. Santa misa. 11 h. Gascones. 12 h. La Serna. 13 h. Braojos
También dejamos marcados los segundos y cuartos sábados de mes la exposición del Santísimo en Braojos a las 20 h.
¿Y los martes? La tarde del martes la tengo libre y celebro en mi pueblo, Miraflores, y, de paso, el párroco, si tiene alguna necesidad, puede disponer de esa tarde.
19 comentarios
¡Bendito sea padre!
Deseo que sus feligreses habituales sean conscientes del encaje de bolillos que debe usted hacer para que ellos disfruten de la santa Misa.
Pero he de reconocer que me produce cierta tristeza que sea el sacerdote quién deba ajustar los horarios de la Misa en función de las actividades lúdicas de los parroquianos.
Antaño todo se ajustaba en función de la hora de la Misa, creo que nuestros ascendientes eran muy conscientes de la importancia de adorar a Dios.
Paz y Bien.
Felicidades a Socio en el día de su Patrón. Supongo bendecirá a los animalitos de aquella zona serrana, una bendición que se la tienen bien merecida. Aquí san Antón se celebra por todo lo alto, con falleras, música y animales de todas las especies como está mandado, además el tiempo acompaña.
Pero para los comentaristas lo que debería hacer D. Jorge es poner la misa coincidiendo con las actividades y que tras unas semanas sin feligreses las suprima y a otra cosa.
Como se nota que viven en ciudad con amplio horario de misas y múltiples opciones de ocio.
Desde luego, ¡si que está entretenido con los horarios de las misas de sus parroquias!. Me ha recordado el título de aquella película "Si hoy es martes, esto es Bélgica" en la que un grupo de turistas recorrían en unos quince días , siete países europeos a ritmo más que frenético. Evidentemente los tiempos cambian, uno recuerda que en otros, era la Iglesia quien los marcaba. El calendario es una muestra, aún de momento. Desde luego , sus parroquianos con ser pocos, son unos privilegiados por tener misa al menos una o dos veces , incluso tres veces en semana con Ud., que hace más kilómetros que Carlos Sainz en el Rally del Dakar. Eso es dedicación y lo demás tonterías, porque por lo que nos cuenta no sólo dice misas en los pueblos y residencia, sino que hay que llevar el día a día de la gestión de los t4emplos , visitar enfermos, suplir a compañeros... y además escribe el blog, y habla por radio. Y no cuenta que también reza por nosotros, tirios y troyanos, que eso se nota D. Jorge y se le agradece un montón, aunque estemos a la recíproca.
Los cristianos sobrevivieron a las persecuciones, de mejor o peor forma, la fe en Cristo, después de 2000 años, se extiende, y de los malos tiempos también hay que sacar virtud, para valorar lo que podemos perder si no la defendemos. Aparentemente puede parecer que retrocedemos, y pensamos que la Iglesia está más pendiente del mundo que el mundo de la Iglesia, pero si lo vemos bien, avanzamos. No como nosotros quisiéramos, sino como Él quiere. ¡Hágase su voluntad!
Por cierto D. Jorge, se echa de menos algún libro suyo de esas anécdotas de curitas que tanto nos han alegrado la existencia.
Que Dios le proteja, la Virgen le acompañe y San José le guíe.
Canon 906 Sin causa justa y razonable, no celebre el sacerdote el Sacrificio eucarístico sin la participación por lo menos de algún fiel.
De allí se concluye que la presencia de los fieles es más que importante para Cristo, pero El sabe esperar y acomodarse a la "humanidad".
Hay una realidad desconocida de "la Iglesia de Pueblo Chico" y adaptarse a ella es de sabio.
Parece mentira pero la realización de todas esas actividades colectivas en lugares de pocos habitantes es esencial y debe ser conservada, es malo no tener nada que hacer.
Ahora la pregunta, con los horarios que tienes puedes conseguir rezar Misa con fieles ?.
Cambio Ave María por Salve.
Un breve par de aclaraciones.
1) Conozco en persona a D. Jorge, privilegio reciente para mí. Y estoy seguro de que las actividades lúdicas de sus feligreses no se realizan en la iglesia, sobre todo por respeto al Santísimo.
2) Si D. Jorge ha decidido que este encaje de horarios era lo más conveniente para todos, aquí paz y después Gloria.
Pero no por ello deja de ser triste que el entretenimiento "mande" sobre la Misa.
No es por D. Jorge, sino por la mentalidad que reflejan los feligreses, y eso que son de los buenos.
Cuantas veces relegamos a Dios a un segundo plano, perdónanos Señor.
Pater, haga que la gente se sacrifique. Desde luego hay que reconocer que la gente, el pueblo, es más bien cómodo, cuando el cura es el que lleva al Señor, y seria al revés, que la gente fuera en busca del Señor...y del señor cura.
¿ Por cierto, le invitan a desayunar o a comer en los festivos ?. O sólo es cuando truena.
Muy querido D. Jorge:
¡Dios le pague sus muchos desvelos en favor de los feligreses de sus pueblos!
“Tenemos un padre que nos cuida lo que solo Dios sabe”, podrán decir ellos sin engañarse, al pensar en usted.
Respecto a su tarea, me ha parecido, a la vez, muy exigente y muy hermosa.
Muy exigente, por las muchas renuncias personales que usted debe aceptar casi a diario, intentando, en lo posible, adaptarse siempre a las necesidades y “huecos libres” que le señalan los parroquianos.
Muy hermosa, por la dedicación y cariño con la que se entrega usted a ella.
Leyéndole, me ha venido a la mente aquello de san Pablo: “me he hecho todo para todos, para ganar, sea como sea, a algunos. Y todo lo hago por causa del Evangelio, para participar yo también de sus bienes” (1 Corintios 9, 22-23).
Muchísimas gracias, D. Jorge.
¡Que participe usted también, más y más, de los bienes del Evangelio!
Me han alegrado y ayudado bastantes comentaristas (Hechos, por partida doble, Anónimo, F.C. Romero, claudio, Miguel Hinojosa, etc.). ¡Gracia a todos!
Un fuerte abrazo, D. Jorge:
José Mari, franciscano
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