Si no nos convertimos, morimos.

En una ocasión, se presentaron algunos a contar a Jesús lo de los galileos cuya sangre vertió Pilato con la de los sacrificios que ofrecían. Jesús les contestó: "¿Pensáis que esos galileos eran más pecadores que los demás galileos, porque acabaron así? Os digo que no; y, si no os convertís, todos pereceréis lo mismo. Y aquellos dieciocho que murieron aplastados por la torre de Siloé, ¿pensáis que eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén? Os digo que no; y, si no os convertís, todos pereceréis de la misma manera." Y les dijo esta parábola: - "Uno tenía una higuera plantada en su viña, y fue a buscar fruto en ella, y no lo encontró. Dijo entonces al viñador: `Ya ves: tres años llevo viniendo a buscar fruto en esta higuera, y no lo encuentro. Córtala. ¿Para qué va a ocupar terreno en balde?´ Pero el viñador contestó: `Señor, déjala todavía este año; yo cavaré alrededor y le echaré estiércol, a ver si da fruto. Si no, la cortas´".
(Luc 13,1 y ss)

O conversión o perdición. No hay opción. No hay una tercera vía. No hay un gris que medie entre el negro y el blanco, ni una tibieza que pacte con talante entre el frío y el calor. O hacemos de nuestra vida un camino de conversión continua, o hemos equivocado el camino hacia la salvación.

Como el enfermo que se aferra a la vida medicándose, como el bebé que busca el abrazo materno para ser amamantado, el cristiano debe agarrarse como una lapa al Espíritu de gracia que le renueva, le transforma a imagen de Cristo, le limpia de impurezas. En definitiva, le convierte.

"El Dios que te creó sin ti, no te salvará sin ti", decía San Agustín. Es nuestro deber trabajar con temor y temblor en nuestra salvación, pero siempre sabiendo que es Dios el que produce en nosotros tanto el querer como el hacer, de forma que nadie pueda gloriarse en sus propias fuerzas ni pretender presentarse delante de Dios con una factura que ponga: `Por esto, aquello y lo de más allá….. se me debe la salvación.´ Somos salvos por gracia, pero una gracia que actúa eficazmente por el amor, no una gracia etérea, pasiva y ajena a nuestro obrar.

Toda conversión es dolorosa. Nadie abandona el pecado y toma camino de la santidad, sin dejarse por el camino jirones de su alma. Ese alma que sabe que necesita ser podada para llevar mejor fruto, pero que cuando ve las tijeras del podador se acobarda y a veces huye. Mas si nuestra identidad está en Cristo, no podemos desear otra cosa que ser transformados a su imagen, libres de toda imperfección, por pequeña que sea. Pidamos pues a Dios que corte nuestras ramas enfermas, nuestros vicios, grandes y pequeños. Pidamos que la savia del Espíritu Santo nos renueve y vivifique para que podamos dar fruto agradable. Fruto que a su vez sirva de alimento al prójimo necesitado de amor cristiano.

Señor, conviértenos a ti, renueva nuestro entendimiento, transforma nuestro corazón. Límpianos de todo mal, abónanos con tu Santo Espíritu y riéganos con la sangre de tu Hijo Jesucristo. Sólo así podremos ser dignos de contarnos entre los que te alabarán eternamente por tu bondad, tu misericordia y tu infinita santidad.
Amén.

Luis Fernando Pérez Bustamante

38 comentarios

  
Carmen Bellver
Yo me quedo con esa imagen de la higuera que no da fruto, pero que la misericordia impide arrancar de raíz. El cuidado amoroso que hace capaz de cavar y echar estiércol. El amor hacia lo que parece perdido.
11/03/07 2:38 PM
  
Luis Fernando
Sí, Carmen, pero fíjate en las cuatro últimas palabras del evangelio de hoy. Sirvan de advertencia.
11/03/07 4:37 PM
  
Torres_pizarro
¡Por Dios, por Dios! ¡Un poco más de humildad...y de misericordia!
O sea, que si yo y unos cuantos millones más no confesamos a Jesus de Nazaret como el Cristo Hijo de Dios, estamos fichados por el Gran Satán, para hacer hoguera con nuestros miserables miembros mortales, no es eso?
¡Anda ya!
¿Cuándo vamos a leer bien la Biblia? ¿Por qué nos empeñamos en darle la vuelta a las cosas? No se trata de hacer a Dios a nuestra imagen y semejanza, SINO AL REVÉS justamente.
¿Y cómo todo un Dios, infinito en todas sus cualidades, puede consentir tamaño desmán?
Yo a mi hijo no lo condenaría jamás a una pena eterna...Hiciese lo que hiciese; es mi hijo y lo amo....¿Y dios ama menos a sus creaturas que yo a mi hijo?
¡Enga ya, juer!....Estamos locos....
11/03/07 8:16 PM
  
Luis Fernando
Oiga, en su última frase no use la primera persona del plural. Si quiere, use la primera del singular.
Y si tiene algún problema con la idea del infierno eterno, cuénteselo a Jesús, que habló del mismo con claridad meridiana.
11/03/07 8:30 PM
  
Torres_pizarro
Luis Fernando -y con esto termino esta estéril discusión- no entenderemos el mensaje del Cristo hasta que no nos convenzamos de algo fundamental:
O nos salvamos todos o nadie se salvará.

Y ahora, justo encima de eso en lo que tus ojos se han fijado, vuelve a leerme. Dios quiere, ama a mi hijo muchísimo más que de lo que yo pueda hacerlo jamás.

Y otra cosa y acabo: No encerremos a todo un ser infinito e incognoscible por definición en un libro...Sea cual sea ese libro...Y si el libro empequeñece el Amor, tíralo al fuego porque miente y engaña.
11/03/07 9:23 PM
  
sofía
Yo me quedo también con el amor que prorroga -aunque avisa, también por amor: Porque nuestra vida sobre la tierra no es eterna, y sería irreversible llegar al final sin haber amado. Nadie va a obligarnos a escoger la Vida, pero se nos pide que nos fijemos en el camino que estamos recorriendo, para ver si nos lleva hacia el Amor, que es Vida, o nos lleva en dirección contraria. Así podremos poner remedio, con la ayuda de Dios.
11/03/07 9:28 PM
  
Torres_pizarro
Sofía, es que yo como hombre y por lo tanto como ser imperfecto, no llegaría a condenar a nadie por toda la eternidad.
Hace unos días se ahorcó una mujer que tenía una depresión severa. ¿Quién la condena?
Leamos el evangelio. Jesús y la acusada de adulterio. Todos dispuestos a cumplir la ley, con la piedra en la mano, con la condena en sus mentes. Era legal la lapidación; estaba en los Libros, dictados por Dios...
¿Cual fue la actitud de Cristo?
11/03/07 9:33 PM
  
Luis Fernando
Sí, es estéril porque usted sitúa la condenación en la intención de Dios, como los calvinistas, y no en la voluntad del hombre en no querer estar en comunión con Dios.

Usted puede amar mucho a su hijo, pero jamás puede obligar a que su hijo le ame. Y el que se niega a amar a Dios, se condena a sí mismo, pues Dios es amor y no hay otra forma de estar en comunión con Él que amándole.

Por cierto, es Cristo quien dice que el infierno existe y es eterno. Y quien dice "El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él."
Por tanto, sea usted honesto. O acepta todo lo que Cristo dijo o no acepte nada. Pero eso de coger lo que me gusta y desechar lo que no me mola, es deshonesto.
11/03/07 9:42 PM
  
sofía
Torres pizarro,
Yo no creo que Dios condene a nadie eternamente, pero sí que nos dice que Él es el Amor y la Vida, y si rechazamos el amor, estamos rechazándole a Él. Existe la posibilidad de rechazarle, es decir, del infierno, que no es un lugar, sino no vivir la Vida eterna de Dios. No sabemos si hay alguien en esa situación o no. Quizás es simplemente no existir ya más (sufrir la segunda muerte) Creo que la misericordia de Dios es eterna, pero que, al menos teóricamente existe la posibilidad de rechazarla.
11/03/07 9:51 PM
  
lutero
ay a donde nos lleva el relativismo. cada cuak con su verdad. pero la Verdad es una. esto no es un carrefur. cojo esto del evangelio, pero lo que no me gustas no lo cojo, y como decia mi padre, dios es bueno y mantiene a pillos. o tempora o mores...
11/03/07 9:59 PM
  
sofía
Respecto a esa mujer que tenía una depresión severa y se ahorcó, estoy segura de que Dios que conoce mejor que nosotros lo que hay en nuestro interior, habrá acogido todo lo bueno que hizo esa persona antes de enfermar. Y quizás también después -nosotros no sabemos lo que había en su mente y en su corazón en sus últimos momentos. Dios está cerca de los que sufren. Nosotros no sabemos juzgar.
Creo sinceramente que está viviendo la Vida de Dios.
11/03/07 9:59 PM
  
sofía
Mire usted, lutero, espero que no lo diga por mí, porque creo que lo que yo he dicho es ortodoxo. Existe la posibilidad de rechazar a Dios y eso es el infierno. No se puede asegurar de nadie que esté en esa situación, ni siquiera de Judas. Eso dice la Iglesia. Sí reconozco que es cosa mía lo de imaginarme el infierno como la segunda muerte: no vivir eternamente, sería como morir "eternamente", al ser su reverso, aunque fuera simplemente dejar de ser.(No está prescrito cómo tengo que imaginarme el infierno, sólo tengo que creer que es la posibilidad de estar sin Dios)
11/03/07 10:19 PM
  
Silveri Garrell
Pienso que el Camino de Perfección que mencionas, es en si mismo apasionante hasta el punto de que quien lo emprende raras veces se puede hechar atrás a no ser que caiga en imperfecciones humanas. Los católicos no arrastramos a más gente por nuestro defecto congénito, o por nuestro pecado si se quiere, pero estas predicas de "conversión" más bien deben dirigirse a ciertos sectores no practicantes, que no, a nosotros los practicantes. El catolico practicante hace lo que puede, y machacarlo con el termino "conversión", es inadecuado. Tampoco San Agustin menciona en sus Confesiones la Penitencia Sagramental frecuente.
12/03/07 9:01 AM
  
Pauper Maestus
Otro De Bello Pallico

http://debellopallico.blogspot.com/2007/03/intimior-intimo-meo-en-lo-ms-hondo-de.html

INTIMIOR INTIMO MEO (en lo más hondo de mi intimidad)

La culpa la tienen, Grassus, todos aquellos que han hecho que en tu universo imaginario nosotros fuésemos representados en tu mente como un "Lucifer" de Folch i Torres, con cuernos y rabito, escondidos en las cuevas de Pedro Botero.
La culpa la tienen todos los que te han dicho que somos cuatro y de extrema derecha, o cuatro toledanos convertidos a egarenses, o un feudo ultraconservador, facha y no sabemos cuantas cosas más. (La Bruixa Pixanera y Listerinus de la Santa Bulla tienen mucha culpa de eso).
Pero la culpa la tienes tú ,dilectísimo Praetor, pensando que podías confiar tus "problemitas" con los medios a estos que ahora tienes como amigos y QUE TE LAS METEN DOBLADAS.
La culpa la tienes tu, por creer que te quieren esos que ahora ostentan el poder político ...
12/03/07 9:23 AM
  
Ester
Torres_pizarro:
No hay nada más tonto que engañarse a sí mismo, pero veo que tú te empeñas en ello. Pensar que todos hagamos lo que hagamos iremos al cielo, es no querer ver nada o estar ciego.
Podrás comprender que Dios es misericordioso, pero también infinitamente justo, y por tanto en él no puede haber contradicción.
Tú mismo!
12/03/07 10:14 AM
  
nachet
"si no os convertís, todos pereceréis lo mismo"

No cabe duda alguna de que el carpintero de Galilea era un talibán. Menos mal que en la Iglesia actual los radicales como él, con su mensaje de infierno y castigo y su religión del miedo, van siendo arrinconados.
Seguro que es hasta preconciliar...
12/03/07 1:41 PM
  
Torres_pizarro
Es curioso cómo entre los términos "infinitamente misericordioso" e "infinitamente justo", hay muchos cristianos (católicos y no católicos) que se inclinan por lo segundo cuando ven que puede haber una contradicción entre ambos.
Pero ¿es que hay algo más contradictorio que Dios cuando le aplicamos la lógica humana?
¡Qué manía tenemos con encasillar y en etiquetar lo infinito, con nuestro pobre y tremendamente FINITO cerebro animal!
12/03/07 3:14 PM
  
Luis Fernando
No hay contradicción entre misericordia y justicia. Cristo mismo es misericordia de Dios que salva al hombre. Pero si el hombre rechaza a Cristo, rechaza su salvación.
Por tanto, no es "culpa" ni voluntad de Dios que alguien se condene.
Ya lo dijo a través del profeta Ezequiel:
Ez 18,31-32
Echad de vosotros todas vuestras transgresiones con que habéis pecado, y haceos un corazón nuevo y un espíritu nuevo. ¿Por qué moriréis, casa de Israel? Porque no quiero la muerte del que muere, dice Yavé el Señor; convertíos, pues, y viviréis.
12/03/07 3:29 PM
  
sofía
La justicia del Señor es misericordia. Pero se puede rechazar el amor. Y Jesús nos avisa para que rectifiquemos y nos dejemos transformar por la misericordia de Dios (perdón y ayuda), porque podemos elegir el camino de la vida o el de la muerte. No son amenazas, sino avisos de alguien que nos quiere.
12/03/07 4:11 PM
  
Ano-nimo
Estupendo post, Luis Fernando.
No hace falta morir físicamente para ver los efectos salvíficos de la conversión. Cuando se vive en una "noche eterna" aquí, en ésta vida, la conversión significa ver la luz, renacer, "despertar de la muerte".
Sofía, yo también pienso (más bien lo sé con certeza) que, efectivamente el infierno es no poder "ver" a Dios y que, además, no hace falta morir físicamente para conocer ese infierno.
Otra cosa es la otra vida; en ese tema no me meto, pues si se sigue, mejor o peor (pues humanos somos) a Cristo, no queda más que confiar en Dios.
Un saludo.
12/03/07 4:32 PM
  
Torres_pizarro
Afortunadamente existen otras cosmovisiones o teogonías más llenas de misericordia que la judeo-cristiana y más extendidas en el mundo que ésta.
Basta leerse a Alan Watts, pongo por caso,para que la esperanza en el corazón de los humanos no se pierda.
Habláis de amar y evitáis la lógica premisa de que para amar, primero hay que conocer. Lo que no se conoce no se puede amar, y que yo sepa nadie puede conocer lo que de por sí es incognoscible. Todos somos Hijos de Dios, cada Yo, cada manifestación de la vida, es una manifestación de El Que Es. Basta que nos quedemos en silencio y acallemos al ego para que Ello se manifieste. Y entonces se ve que tanto el Bien como el Mal son realidades opuestas de una misma Naturaleza, no pudiendo existir la una sin la otra.
12/03/07 5:58 PM
  
nachet
Oye, Torres-pizarro: Alan Watts, o cualquier otro gurú que se te ocurra ¿resucitó al tercer día después de muerto?
12/03/07 6:21 PM
  
Torres_pizarro
Oye, nachet, ¿tú tienes una prueba comprobable por el 100X100 de la población de este mundo llamado Tierra, de que eso lo haya hecho alguien? ¿Alguien lo puede demostrar a TODO EL MUNDO MUNDIAL?
No perdamos la perspectiva, por favor. Hablamos desde el terreno de la fe, por lo que esa pregunta que me has lanzado no tiene respuesta fuera de la creencia cristiana.
De ello podemos deducir de que la condena o salvación, sólo afecta a los creyentes cristianos; ir más allá es un intento vano de soberbia y puede que de xenofobia incluso.
Con ese pensar los pueblos creyentes se han autodestruido en guerras interminables.
Si hablamos del corazón del hombre, necesitamos verdades universales, y la llamada "resurrección de Jesús", mal que les pese a algunos -que no son mayoría en este mundo; nunca lo han sido y quizás jamás lo sean- no es ni puede ser dogma para todas las razas que pueblan el planeta Tierra....Porque hay "otras verdades", porque Ello o como quiera que lo lla...
12/03/07 6:33 PM
  
sofía
Torres,
Creo que el cristianismo distorsiona con frecuencia el mensaje de Jesús, pero no hay otra religión en la que Dios sea Amor. Es por amor a los hombres, por lo que Dios quiere que nos amemos unos a otros como a nosotros mismos, y nos pide cuentas si hacemos daño a los demás. Dios defiende al pobre, al débil, al indefenso, y se toma como una ofensa el mal que se le hace al ser humano.
Un dios light para consumo personal, aparte de ser un espejismo, no nos lleva a amar al prójimo. Aunque estoy de acuerdo contigo en que se da a veces una imagen falsa de un dios justiciero que no tiene nada que ver con el Abba de Jesús.
12/03/07 6:38 PM
  
Torres_pizarro
llames, repartió tanto y tan bien la Verdad que nadie debería osar decir que la posee para sí solo.
El Reino está dentro de cada hombre y de cada mujer...De todos los hombres y mujeres que habitan junto a nosotros, sean como sea, vivan donde vivan, hayan hecho lo que hayan hecho, sean de la raza, fe, nacionalidad o del sexo que sean.
El mal, la condenación, el infierno, lo sufre el mismo Dios calladamente en cada uno de nosotros, aquí y ahora. Por eso cuando auxiliamos al necesitado, estamos auxiliando al mismo Dios a través de la persona necesitada. No estamos separados tal como nuestro ego nos imagina. La separación empezó en el Génesis, y el final será cuando el lobo y el cordero cohabiten juntos, cuando el mal -el trono del bien-y el bien sean la misma cosa, como era en un principio....
12/03/07 6:40 PM
  
Luis Fernando
Ah, vale, vale, ya nos vamos quitando la careta, señor Torres. Como desde el propio Cristo se le argumenta en contra de sus tesis, va y nos suelta lo de Alan Watts, uno de los responsables de la introducción del orientalismo, "versus light" por supuesto, en Occidente.

Está bien eso de hacerse una deidad a imagen y semejanza del propio parecer. Lástima que a la hora de adorar a esa deidad, lo único que se hace es adorar a una imagen del propio yo. Claro que todo se arregla considerándose uno a sí mismo como parte de la deidad, ¿verdad?
Así no hay condenación posible. Todos somos uno con Dios y lógicamente Dios no va al infierno.
12/03/07 6:47 PM
  
torres_pizarro
Sofía, amiga, sí hay otras religiones en donde Dios -con otro nombre, claro- es Amor.
Hay que leer más. Acércate a la Gita budista.
Sin embargo estoy contigo que en cuanto al Amor, no hay filosofía más grande y sublime que la de los 4 evangelios....Fíjate que sólo nombro a esos cuatro libros. Por eso no rechazo que me llamen cristiano.
Saludos cordiales
12/03/07 6:50 PM
  
torres_pizarro
Dice Luis Fernando:"Así no hay condenación posible. Todos somos uno con Dios y lógicamente Dios no va al infierno."
Y digo yo: ¿No es eso realmente hermoso? ¿No es lo más hermoso que un oido humano puede escuchar de otro humano...o del mismo Dios? ¿No es esa la Buena Nueva, la que se regala, la que se da sin contrapartida, la que no atemoriza, la que ilusiona y da esperanza en la desgracia y en el dolor?
Porque si para que te den tienes que dar tú primero, ¿a qué llamarlo la Mejor Noticia que se ha esparcidopor el planeta? Eso lo hacemos nosotros todos los días...Mi banco me da dinero si lo tengo...¡Pero qué maravilloso sería que te dieran dinero cuando lo necesitas, sin necesidad de dar ningún tipo de aval...!
Sin darte cuenta, has dado con la clave de la felicidad, aquella que sentías cuando tu madre te daba un beso sin haberlo pedido antes; sólo hacías por existir. Eras y te daban, eso era todo.
Gracias por revelármelo, amigo.
12/03/07 6:58 PM
  
Luis Fernando
Oiga, torres, la buena nueva consiste en que el hombre estaba alejado de Dios sin posibilidad alguna de volver a estar en comunión con él, por la sencilla razón de que ese hombre no buscaba a Dios. Entonces Dios se hace hombre y nos ofrece la salvación. Pero como Dios no nos ha hecho robots, el hombre puede elegir si acepta el regalo que Dios le hace o lo rechaza.
El amor, para ser verdadero, ha de ser libre. Es decir, si Dios nos hubiera puesto un chip para que le amáramos, ¿sería eso amor?
No, sería otra cosa.
Por eso mismo, si el hombre persiste en no amar a Dios, y al prójimo, no puede salvarse. Y eso no afecta para nada a la bondad de Dios, pues Él ya hizo todo para salvarnos.
Así que vuelvo a citar a San Agustín: "el Dios que te creó sin ti, no te salvará sin ti"

sigo....
12/03/07 7:48 PM
  
Luis Fernando
Por otra parte, si ser salvo es serlo al modo como presentan la salvación las religiones orientales, apaga y vámonos.
Por ejemplo, ¿usted se piensa de verdad que el Nirvana es atrayente para alguien que ha conocido de verdad el cielo cristiano, comunión con Dios, en este mundo?
Por no hablar del inexistente concepto de gracia en Oriente, donde todo es un pelagianismo bestial.

Vamos, que no cuela.
12/03/07 7:56 PM
  
Torres_Pizarro
Pero es que amigo LF, lo que no os cabe en la tête a algunos es que sencillamente NO PODEMOS AMAR A DIOS...Eso es algo imposible para los humanos por la sencillísima razón de que, te repito, "no se puede amar aquello que no se conoce" y nos es imposible conocer lo infinito. Luego el amor sólo y unicamente puede venirnos de Dios en una sola y única dirección.
Pero soy un hombre razonable, dime cómo y de qué forma un humano puede amar a Dios y lo someteré a examen.
12/03/07 8:27 PM
  
Torres_Pizarro
....Y por favor te ruego que no me contestes conque amar a Dios es cumplir sus mandamientos. Porque eso no es amor. Es obediencia, interés, sometimiento,interés, corresponder, interés,miedo,interés, y todo lo que quieras; pero amor como el de una madre no lo hay en el mundo entero. Ella da sin recibir nada a cambio...NADA...¿Y va a ser Dios menos que una madre?
12/03/07 8:29 PM
  
Luis Fernando
Da la casualidad de que dado que Dios se ha manifestado a sí mismo, ya podemos conocerle lo suficiente como para amarle. De hecho, ese es el principal mandamiento: amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente.

El infinito se hizo hombre para que como hombres pudiéramos amarle y adorarle.

Qué pena me da usted que piensa que no puede amar a Dios.

Y sí, obviamente amar a Dios implica cumplir sus mandamientos. ¿O acaso el que ama no busca complacer al amado?
Pues lógicamente, si amamos a Dios queremos hacer su voluntad. De lo contrario, nuestro amor sería una farsa.
Ah, y no hay problema si a veces caemos. Dios mismo nos restaura si volvemos a Él arrepentidos.

Eso es, en esencia, la salvación. Le amamos porque Él nos amó primero. Y tanto nos amó que dio su vida por nosotros.
12/03/07 9:19 PM
  
Torres_Pizarro
Era un diálogo interesante el que manteníamos, hasta que usted se subió a mi chepa y dijo aquello: Yo soy mejor que tú.
Perdone usted que le cite:"Qué pena me da usted que piensa que no puede amar a Dios."

En fin, le podría citar un montón de versículos evangélicos que le rebajarían la soberbia un rato esta noche, pero a lo peor era yo quien le disputaría el lugar más cercano al anfitrión y esa lucha no me interesa en absoluto.
Y para que repose sin pena -iba a añadir que sin gloria también, pero me equivocaría- le dejo que duerma tranquilo en la paz de su dios...Así, con minúsculas, pequeñito y perdona-vidas; tal que usted.
Buenas noches y que con su pan se lo coma...A su dios o lo que a usted más le apetezca.
12/03/07 9:41 PM
  
ajenjo de ricino
Se cumplen los mandamientos porque se ama a Dios. El Amor es aceptación del sacrificio, alegría ante el cumplimiento de un deber moral. Amor es la negación de uno mismo al entregarse. Negación del mundo. Afirmación de lo que nos acerca a Dios: "sed, pues, perfectos, como vuestro padre celestial es perfecto". A eso estamos llamados.

Dios nos crea en nuestra individualidad, como personas. El rechazo de esa realidad no conduce más que al gregarismo asiático y al nihilismo, a la aniquilación, se enmascare como se quiera. Solicito genuflexo se me absuelva del pecado de xenofobia. Es sólo una imagen.

Sin la gracia, no hay salvación; sin nuestra voluntad, sin libertad, no tiene sentido nuestra existencia. La salvación depende, pues, de una decisión personal y de la gracia y la misericordia divinas. Las colectividades ni se salvan ni se condenan.

12/03/07 9:42 PM
  
Luis Fernando
No, yo no soy mejor que usted. Y si en algo fuera mejor, no sería por mi bondad innata sino por la gracia de Dios que opera en mí.

No basta con citar montones de versículos de la Biblia para estar en la verdad. Y si lo que quiere es citarla para echarme en cara mis defectos, no se moleste. Los tengo a montones.
Pero desde mi pequeñez, desde mi condición pecadora, amo a Dios. Y por ello quiero amoldar mi voluntad a la suya. Eso es, en lo fundamental, ser cristiano. Eso es, en esencia, la salvación.
12/03/07 9:56 PM
  
nachet
"esa pregunta que me has lanzado no tiene respuesta fuera de la creencia cristiana"

Será por eso que soy cristiano...
lo que no entiendo entonces es toda tu jerigonza trufada de citas y conceptos evangélicos. Si la resurrección del Señor es mentira ¿por qué iban a ser ciertas las bienaventuranzas, relatadas ambas por los mismos testigos?
Sólo eres un mercader de espiritualidad, y como te acercas a un foro cristiano usas términos cristianos para ver si pescas a algún incauto, pero Yahvé no está en tu corazón, ni el Mesías en tu mente.
Vete en paz.
12/03/07 10:09 PM
  
sofía
Antes de que te vayas en Paz: Sí podemos amar a Dios.
Dice una canción:
"Dios es amor, y cuando tú amas es Dios quien ama..."
Nos dejamos amar por Dios, y Él nos hace capaces de amar. Amamos con el amor que Él nos da.
"Tú eres el recipiente,
la bebida es de Dios
y Dios es el sediento"
(Dag Hammerksjold)
12/03/07 10:36 PM

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