InfoCatólica / Cor ad cor loquitur / Archivos para: 2018

22.10.18

Libertad, igualdad, fraternidad

Hace unos minutos, en la Cope, cadena propiedad de la Conferencia Episcopal Española, José Luis Restán ha adelantado que hoy en El Espejo van a hablar de una iniciativa de los focolares, consistente en introducir la fraternidad en la política.

Y explica: Chiara Lubich dijo que la libertad y la igualdad ya habían llegado a la política, pero no la fraternidad. Ahora eso va a cambiar.

Como no me acabo de fiar de mi capacidad de comprender lo que oigo en según qué sitios, he buscado algo sobre este asunto y me he encontrado este enlace reciente de Alfa y Omega:

Libertad, igualdad… ¿y la fraternidad?

Empieza así:

Chiara Lubich, fundadora del Movimiento de los Focolares, siempre se refería a la fraternidad cuando pisaba terreno político, sobre todo, en los parlamentos e instituciones que visitó a lo largo de su vida. Solía decir que tras la Revolución francesa y hasta nuestros días, la libertad y la igualdad se han ido desarrollando como verdaderas categorías políticas, algo que no sucedió con la tercera pata del trinomio: la fraternidad. Y abundaba: solo las tres juntas podrían dar como resultado una política que responda a los problemas de hoy.

Preocupado estaba cavilando sobre cómo es posible que, tras la clara oposición entre el mundo que surgió de lo ocurrido en Francia en 1789 y la visión católica tradicional del Reino de Dios, ahora parezca que ambas realidades pueden ir de la mano. Y entonces llego a este discurso de Benedicto XVI a los miembros de la curia romana del 22 de diciembre del 2006. Dijo entonces el papa emérito:

Leer más... »

16.10.18

Cambiaron la verdad de Dios por la mentira

Mucho se habla y se escribe acerca de la raíz de la crisis de abusos sexuales en la Iglesia. Evidentemente no hay una sola causa o motivo que explique lo ocurrido. Pero sí se dieron situaciones que “ayudaron” a crear el caldo de cultivo para que una situación que seguramente se ha dado a lo largo de los siglos -el pecado siempre está presente en mayor o menor medida en el ámbito humano de la Iglesia-, alcanzara proporciones de plaga bíblica.

Por ejemplo, cuando se cambia la doctrina católica sobre la soberanía absoluta de Cristo en todos los ámbitos -por supuesto también el político- por la doctrina liberal-modernista-laicista, con su componente pelagiano e idolátrico del hombre (habría mucho que escribir sobre esto), se abre inmediatamente la espita a que pase lo que relata San Pablo en Romanos:

Por lo cual Dios los entregó a las apetencias de su corazón, a una impureza tal que degradaron sus propios cuerpos; es decir, cambiaron la verdad de Dios por la mentira, adorando y dando culto a la criatura y no al Creador, el cual es bendito por siempre. Amén.
Por esto, Dios los entregó a pasiones vergonzosas, pues sus mujeres cambiaron las relaciones naturales por otras contrarias a la naturaleza; de igual modo los hombres, abandonando las relaciones naturales con la mujer, se abrasaron en sus deseos, unos de otros, cometiendo la infamia de las relaciones de hombres con hombres y recibiendo en sí mismos el pago merecido por su extravío.
Y, como no juzgaron conveniente prestar reconocimiento a Dios, los entregó Dios a su mente insensata, para que hicieran lo que no conviene: llenos de toda clase de injusticia, maldad, codicia, malignidad; henchidos de envidias, de homicidios, discordias, fraudes, perversiones; difamadores, calumniadores, enemigos de Dios, ultrajadores, altaneros, fanfarrones, ingeniosos para el mal, rebeldes a sus padres, insensatos, desleales, crueles, despiadados; los cuales, aunque conocían el veredicto de Dios según el cual los que hacen estas cosas son dignos de muerte, no solo las practican sino que incluso aprueban a los que las hacen.
Rom 1,24-32

Quien saca a Cristo del trono que le corresponde, acaba sacando a Cristo de todos los ámbitos, incluido el de la moral. De tal manera que lo que siempre ha sido juzgado y condenado con el fin de ser redimido (adulterio, sodomía, etc), ahora es “dignificado” para su posterior uso como agente de profanación del Cuerpo y la Sangre de Cristo.

Leer más... »

2.10.18

El hombre natural no capta lo que es propio del Espíritu de Dios

Encíclica Humani Generis, Pío XII (1950):

… Porque las verdades tocantes a Dios y a las relaciones entre los hombres y Dios se hallan por completo fuera del orden de los seres sensibles; y, cuando se introducen en la práctica de la vida y la determinan, exigen sacrificio y abnegación propia.

Ahora bien: para adquirir tales verdades, el entendimiento humano encuentra dificultades, ya a causa de los sentidos o imaginación, ya por las malas concupiscencias derivadas del pecado original. Y así sucede que, en estas cosas, los hombres fácilmente se persuadan ser falso o dudoso lo que no quieren que sea verdadero.

Discurso de apertura del Concilio Vaticano II, Juan XXIII (1962):

No es que falten doctrinas falaces, opiniones y conceptos peligrosos, que precisa prevenir y disipar; pero se hallan tan en evidente contradicción con la recta norma de la honestidad, y han dado frutos tan perniciosos, que ya los hombres, aun por sí solos, están propensos a condenarlos, singularmente aquellas costumbres de vida que desprecian a Dios y a su ley, la excesiva confianza en los progresos de la técnica, el bienestar fundado exclusivamente sobre las comodidades de la vida.

1ª Carta de San Pablo a los corintios:

Pues el hombre natural no capta lo que es propio del Espíritu de Dios, le parece una necedad; no es capaz de percibirlo, porque solo se puede juzgar con el criterio del Espíritu. 
1 Cor 2,14

Guárdanos, Señor, en tu verdad.

Luis Fernando Pérez Bustamante

27.09.18

Los templos vacíos

Post publicado el 9 de octubre del 2006. Republicado el 27 de septiembre del 2018.

“Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.”
(Mateo 4,17)

He leído en un foro de Internet el siguiente argumento: “El problema que se detecta ahora es que la Iglesia no sabe conectar con los jóvenes, porque tampoco sabe conectar con el mundo post moderno". Yo lo veo exactamente al revés. Es el mundo post moderno quien no sabe conectar con la Iglesia, con Dios, con Cristo, con la cruz, con el compromiso de llevar una vida de santidad, de sacrificio, de amor entregado en fidelidad al Señor.

Leer más... »

26.09.18

Impunidad, descaro y el 11-S de la Iglesia

Son incontables las noticias que hemos dado en los últimos años sobre declaraciones y actuaciones escandalosas por parte de instituciones e individuos, mayormente sacerdotes, de la Compañía de Jesús. Empezando por el actual Prepósito General, el P. Arturo Sosa, que tuvo el cuajo de asegurar que había que reinterpretar a Jesucristo respecto a la indisolubilidad del matrimonio y «discernir» lo que realmente dijo, ya que en aquella época «nadie tenía una grabadora». Más de un año y medio después de semejante barbaridad, ni se ha desdicho de la misma ni nadie con autoridad sobre él le ha pedido que rectifique.

La última noticia escandalosa protagonizada por jesuitas llega de México. La Universidad de la Compañía de Jesús en Guadalajara acoge un evento proabortista. No va a ser un debate en el que haya dos bandos, uno provida y otro proabortista. Las tres ponentes son favorables al derecho al aborto. (Actualizado: la noticia ha sido aún más escandalosa)

¿Cómo es posible que siquiera se atrevan a organizar algo así, haciendo publicidad de ello, en una universidad que se dice católica? Pues porque saben que gozan de absoluta impunidad. Y cuando los perversos son conscientes de que nada ni nadie pondrá freno a sus perversiones, no solo las cometen, sino que presumen de cometerlas.

Algo parecido ocurre con otro «insigne» jesuita, el P. James Martin. Si alguien podía dudar hace años de la existencia de un lobby gay en la Iglesia, es evidente que ya no cabe dicha duda. Existe y es promocionado abiertamente desde sectores muy destacados de la jerarquía. Y el P. Martin presume de ello. ¿Cómo no habría de hacerlo? Sería absurdo.

La verdadera pregunta es que si alguien que predica claramente contra la doctrina católica es invitado por cardenales, arzobispos y obispos a dar charlas y es invitado, ni más ni menos, que a todo un Encuentro Mundial de las Familias organizado por la Santa Sede, ¿en base a qué se puede afirmar que la propia Iglesia respeta sus enseñanzas?

Esto no es de ahora. Hace justo cuatro años, en pleno sínodo extraordinario sobre la Familia, el cardenal Pell advirtió:

«La comunión para los divorciados vueltos a casar es para algunos padres sinodales -muy pocos, ciertamente no la mayoría- solo la punta del iceberg, el caballo de Troya. Ellos quieren cambios más amplios, el reconocimiento de las uniones civiles, el reconocimiento de las uniones homosexuales»

De hecho, la famosa frase del papa Francisco «si una persona es gay y busca al Señor y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para juzgarla?», era en el contexto de una pregunta sobre el lobby gay dentro de la propia Iglesia.

Parece evidente que están en el proceso de cambiar la doctrina por la vía de los hechos. Estamos en plena demolición del edificio de la fe católica. Recientemente Mons. Ganswein dijo que la nueva crisis de los abusos sexuales y su encubrimiento -que no tiene nada de nueva, dicho sea de paso- era el 11-S de la Iglesia. Puede que a nivel mediático así sea, pero a nivel doctrinal, el 11-S de la Iglesia fueron los dos sínodos sobre la Familia -primer avión- y la exhortación apostólica Amoris Laetitia -segundo avión-. Tras semejante ataque, las dos torres de la fe católica, doctrina y moral, no pueden hacer otra cosa que colapsar. Podrá tardar más o menos pero, si Dios no interviene por medios ordinarios o extraordinarios, caerá. Y arrastrará consigo no unos pocos miles de almas, sino a millones y millones, de forma que quede en evidencia la razón por la cual nuestro Señor Jesucristo preguntó si habría fe en la tierra cuando Él regresara.

Mucho se ha especulado sobre cuál podría ser el “katejon” que será retirado para que se manifieste el hombre de perdición, tal y como profetiza San Pablo en 2Tes 2,7. Mi sugerencia es que tal papel lo ha ocupado la Iglesia docente, que lleva en plena retirada desde hace décadas, en un proceso que se ha acelerado vertiginósamente en este pontificado. Pero sólo Dios sabe si tal cosa es así.

Cristo, ven pronto. Cuéntanos, Señor, entre tus elegidos.

Luis Fernando Pérez Bustamante