Venid a mí y yo os aliviaré
Si un ser querido y/o tú mismo estáís pasando por una enfermedad grave, dolorosa, tanto si es curable como si no:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si estás pasando por dificultades económicas importantes, y no sabes si mañana tendrás el pan nuestro de cada día:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si estás pasando por una crisis matrimonial de la que no sabes cómo salir:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si temes caer en el pozo de la depresión, sea por la razón que sea:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si te angustia la situación en tu país:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si te angustia la situación en el mundo:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si te angustia la situación en la Iglesia:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si te desesperas por tu falta de costancia en el camino de la santidad:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si sientes que se te acaba la fe:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si sufres por tus hijos:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si sufres por tus padres o hermanos:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
Si te sientes solo, despreciado, abandonado o al borde del abismo:
Mat 11,28
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré.
En toda situación, recuerda:
Fil 4,6-7
Nada os preocupe; sino que, en toda ocasión, en la oración y en la súplica, con acción de gracias, vuestras peticiones sean presentadas a Dios. Y la paz de Dios, que supera todo juicio, custodiará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.
Laus Deo Viriginique Matri.
Luis Fernando Pérez Bustamante
18 comentarios
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LF:
No crea usted cosas raras.
Gracias.
Eleva tu pensamiento, al cielo sube, por nada te acongojes, nada te turbe. A Jesucristo sigue con pecho grande, y, venga lo que venga, nada te espante.
¿Ves la gloria del mundo? Es gloria vana; nada tiene de estable, todo se pasa. Aspira a lo celeste, que siempre dura; fiel y rico en promesas, Dios no se muda.
Ámala cual merece bondad inmensa; pero no hay amor fino sin la paciencia. Confianza y fe viva mantenga el alma, que quien cree y espera todo lo alcanza.
Del infierno acosado aunque se viere, burlará sus furores quien a Dios tiene. Vénganle desamparos, cruces, desgracias; siendo Dios tu tesoro nada te falta.
Id, pues, bienes del mundo; id, dichas vanas; aunque todo lo pierda, sólo Dios basta. Amén.
Y disculpa, Teresa, por prosear tus inigualables versos.
"Cielo y tierra pasaran, pero Mis Palabras no pasaran".
Nunca esta uno mas a las puertas de encontrarse con Dios que cuando sufre, porque es cuando tiene el corazon mas dispuesto en humildad a clamar por SU Santisimo Nombre. Los cristianos damos Fe de que contesta, cuando lo hacemos de todo corazon, con toda el alma. EL mismo lo dice infinidad de veces en la Escritura;
"Me invocaréis, y vendréis a rogarme, y yo os escucharé. Me buscaréis y me encontraréis,
cuando me busquéis de todo corazón."(Jeremias;29;12-13)
"Pero desde allí buscarás al SEÑOR tu Dios, y lo hallarás si lo buscas con todo tu corazón y con
toda tu alma2(Deuteronomio;4;29)
"Porque así dice el SEÑOR a la casa de Israel: Buscadme, y viviréis""(Amos;5;4).
La Paz de Cristo.
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LF:
Cuenta con mis oraciones para que el Señor te dé alivio y, si es posible, te retire parte de la carga.
No seamos como toros bravos que no admiten el yugo y la carga de Cristo, sino mansos bueyes que con la Gracia de Cristo se nos hace el yugo suave y la carga ligera.
Por muchas tribulaciones hemos de pasar para llegar al Reino de los Cielos. Todas las penalidades de este mundo no son nada con el peso de Gloria que se nos dará, una medida plena, rebosante, se nos derramará en el seno, dijo San Pablo. Animo y piense que no es Vd. la única que sufre grandes tribulaciones por llegar al Reino de los Cielos.
Gracias por sus palabras de aliento.
¡Será "no doy más de mí"!
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