Cáritas es una ONG católica no filantrópica

El 27 de mayo del año 2011, Benedicto XVI se dirigió a la Asamblea general de Cáritas Internationalis. Tras alabar su labor social, explicó algo que no está del todo claro que se tenga muy en cuenta:

Caritas Internationalis es distinta de otras agencias sociales porque es un organismo eclesial, que comparte la misión de la Iglesia. Esto es lo que los Pontífices han querido siempre y esto es lo que vuestra Asamblea General debe afirmar con fuerza.

En otras palabras, Caritas no es una ONG más. Tiene una identidad cristiana, católica. Y en cuanto tal, es lógico pensar que debe dar siempre testimonio de su condición. Hay que huir de cualquier tentación de aconfesionalidad, de cualquier intento de tapar una simbología cristiana, de cualquier acción encaminada a presentar un rostro meramente humanista para, como le he oído decir a algún responsable de la institución, “no molestar a los que no comparten nuestra fe".

No en vano, en su primera homilía como pontífice, el Papa Francisco lanzó la siguiente advertencia:

«Si no confesamos a Jesucristo, no vale. Nos convertiríamos en una ONG filantrópica, pero no seríamos la Iglesia»

Es por ello que, sin dejar de alabar la gran labor social que lleva a cabo Cáritas en España, no debemos dejar de pedir a esa querida parte de nuestra Iglesia que, efectivamente, se muestre de forma más “visible” en sus carteles, en sus campañas, en sus comunicados, etc, como institución eclesial católica. De hecho, si como dijo Benedicto XVI, Caritas comparte la misión de la Iglesia, habrá que reconocer que dicha misión consiste esencialmente en evangelizar y llevar a Cristo a los hombres. Eso se hace ayudando a los pobres en sus necesidades materiales, pero también en sus necesidades espirituales. No en vano, en la Evangelii Gaudium, el papa Francisco indica:

Puesto que esta Exhortación se dirige a los miembros de la Iglesia católica quiero expresar con dolor que la peor discriminación que sufren los pobres es la falta de atención espiritual. La inmensa mayoría de los pobres tiene una especial apertura a la fe; necesitan a Dios y no podemos dejar de ofrecerles su amistad, su bendición, su Palabra, la celebración de los Sacramentos y la propuesta de un camino de crecimiento y de maduración en la fe.

(EG, 200)

Por otra parte, sin dejar de denunciar las raíces de la pobreza y las injusticias sociales, Caritas no puede caer en el error de soltar discursos e ideas populistas, más propios de la extrema izquierda antisistema que de la fidelidad a la doctrina social de la Iglesia. En otras palabras, ni Caritas es comunista por decir que es una vergüenza que haya recorte en el gasto social, que haya gente en España que lo pasa muy mal, que no da a basto para atender tanta necesidad, ni tampoco debe convertirse en un eco de las tesis político-económicas de Podemos o del movimiento okupa que, como dice el cartel que encabeza este post, “fomenta la ocupación de viviendas vacías". Esas cosas, o se explican bien, o mejor no se dicen, porque no está el patio como para que desde la Iglesia parezca que se anima a ocupar la vivienda ajena.

Como acaba de escribir Mons. López de Andújar, obispo de Getafe:

Hay que aprovechar esta situación difícil para no caer ni en el abstencionismo, ni el populismo, ni en utopías irrealizables, sino para buscar razonablemente, con la luz del sentido común y de la revelación, lo que sea más conveniente para el bien de la persona y de la sociedad.

Desde una sana confesionalidad y desde la elaboración de propuestas sensatas y realizables, Caritas podrá realizar su labor aun mejor de la que hace ahora. Labor que merece nuestro apoyo, nuestra alabanza y nuestro agradecimiento.

Luis Fernando Pérez Bustamante

1 comentario

  
Luis Fernando
Para ver mejor el cartel, hagan click sobre la imagen.
06/11/14 10:39 AM

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