10.07.16

El pan de vida... que a veces mata. La recepción eucarística en un villancico hispánico del siglo XVII

En estos tiempos en que eminentes prelados, con inaudita audacia -como se diría en el lenguaje eclesiástico de antaño-, vienen deslizando caliginosas sugerencias respecto a la recepción eucarística, puede ser una buena idea acercarnos a uno de los tantos villancicos de tema eucarístico que en lengua castellana se compusieron a lo largo y ancho del mundo hispano.

Leer más... »

30.08.15

No al pop en la liturgia: reflexiones de J. Ratzinger

Han sido ya varias las veces que en nuestro blog ha aparecido al cuestión del estilo musical apropiado para la liturgia. Sigue estando bastante extendida la idea de que la liturgia debe adoptar el estilo musical que esté de moda o que guste más a los asistentes.

Hoy he querido ofrecer a los lectores un texto a mi juicio muy claro e interesante sobre ello. Es un extracto de un trabajo publicado en 1990 por el entonces cardenal Joseph Ratzinger, con el título Premisas bíblicas para la música de Iglesia. La versión española que reproduzco puede encontrarse dentro del libro Un canto nuevo para el Señor (ed. Sígueme, Salamanca, 1999).

Ratzinger detecta en nuestra época una suerte de esquizofrenia artística entre el pop, con su pretensión de ser la música “popular”, y un esteticismo elitista que sólo es aceptado por un público minoritario. Ambos son incapaces de cumplir con lo que se espera de la música en el culto a Dios.

Dado que el capítulo referente al elitismo de la música “culta” contemporánea es de interés sólo para un número reducido de lectores, me limito a reproducir aquí las reflexiones de Ratzinger sobre la música pop. Aquí las tienen (las negritas son mías):

Leer más... »

28.07.15

La belleza en la liturgia: "demasiado bonito, parece un concierto"

Acabo de regresar de una estancia en Francia por motivos de trabajo. Allí he tenido ocasión, naturalmente, de tratar sobre cuestiones relacionadas con la música de órgano, y por supuesto también con la música en la liturgia.

Una de las primeras cosas que a uno le llaman la atención -lo digo así, en general, porque ya me ha ocurrido varias veces- es que al norte de los Pirineos la gente parece tener bastante menos prisa durante las celebraciones. Puede que la estampida tras el ite, missa est vernáculo o latino sea similar a la que acaece entre nosotros, pero hay otros detalles en los que se manifiestan diferencias. En la iglesia en la que asistí a la Misa este pasado domingo, inmediatamente después de la homilía hubo un prolongado silencio acompañado por una intervención del órgano, con el fin de que los textos sagrados proclamados junto con los comentarios del predicador pudieran ser meditados por los asistentes. Lo mismo sucedió después de la comunión, donde hubo una larga acción de gracias que se prolongó bastante más allá de la purificación de los vasos. Nuevamente el órgano intervino ampliamente en este momento.

Estos espacios concedidos, en lo externo, a puras manifestaciones de belleza musical dentro de la celebración trajeron a mi memoria uno de los cambios de actitud más penosos de los que se han producido en las últimas décadas dentro de la Iglesia: los escrúpulos ante la belleza.

Leer más... »

7.06.15

En el Corpus Christi: Pange lingua y O sacrum convivium

La solemnidad del Corpus Christi es la referencia de una gran cantidad de música sacra, sobre todo en la compuesta en España. Entre los siglos XVI y XIX hay dos referencias litúrgicas que dominan la actividad de la música de la Iglesia en España e Hispanoamérica: la Virgen María y la Eucaristía. Y las dos melodías litúrgicas que con más frecuencia las representan son respectivamente la Salve y el himno Pange Lingua. Seguramente no es una casualidad que el catolicismo hispano se volcara tan intensamente en estos dos aspectos de la fe, objeto de polémica con los protestantes. 

Leer más... »

1.02.15

El introito o canto de entrada de la Misa

En este artículo voy a tratar del canto de entrada de la Misa o introito. Me serviré para ello del conocido manual de Mario Righetti Historia de la liturgia (BAC, 1956), así como del libro El canto gregoriano, de Juan Carlos Asensio (Alianza, 2003)

El nombre clásico que el canto de entrada recibe en la liturgia católica es introitus, “introito”, del latín introeo, “entrar”. El canto del introito no está entre los más antiguos dentro de la liturgia. Su función es la de acompañar la entrada del celebrante, y lógicamente el énfasis en este aspecto más bien externo de la celebración sólo pudo darse una vez mitigada la persecución y la clandestinidad inicial.

Hacia el año 426 San Agustín da a entender que por entonces no existía el introito en las iglesias de África. El pasaje en cuestión relata el modo en que daba comienzo la celebración en África. Se había producido una curación extraordinaria en la mañana de Pascua, y el santo obispo de Hipona llegó a la iglesia, llena de fieles entusiasmados y en acción de gracias. Entonces San Agustín relata:

Leer más... »