El machismo de la cultura de la muerte

¿Por qué cuerpo de la mujer tiene que soportar un aborto o tomar la píldora para tranquilizar al hipotético padre o a la familia que presiona o a la sociedad que deja sola a la mujer? Evidentemente antes de cualquiera de esas dos intervenciones ha habido un varón que ahora o desaparece o presiona a la mujer para que ejerza esta violencia sobre su propio cuerpo mientras él espera, más o menos tranquilamente, a que pase la tormenta pero sin que su cuerpo sufra nada.

He incidido en varias ocasiones en la necesidad de que los comunicadores cristianos hagan frente al avance de la cultura de la muerte con las armas semióticas y de lenguaje necesarias. Por fin, hace unos días, en uno de los comentarios a mi último artículo, una lectora –que no conozco– dio en la diana. Por fin, creo que alguien ha descubierto una clave eficaz. Todavía no lo sé con seguridad, por eso escribo este artículo, para apuntar mis sugerencias y que personas más preparadas que yo en estas lides del lenguaje, antropología cultural, publicidad, etc. puedan llevar el razonamiento más lejos que el mío, aunque en justicia tampoco me pertenece propiamente.

Se trata de lo siguiente. Palabras como progreso, derechos, libertad, tienen una connotación positiva. Si a estas palabras unimos cualquier otra categoría encontraremos que, como por osmosis, el segundo concepto se carga de valor positivo. Así es como se ha hecho con el aborto o la píldora del día después: “El aborto es un derecho, es progreso”. Hace unos días la ministra afirmaba que  la píldora va a permitir que las mujeres puedan ejercer libremente su derecho a la salud sexual. Expresiones como estas han utilizado esta estrategia y el aborto o la píldora aparecen ante la opinión pública como buenos.

La clave de lenguaje para deshacer ese par de valores, no pasa por  hablar de los derechos del niño no nacido, o de la promoción de la promiscuidad que supone la píldora. Aunque estos razonamientos sean ciertos. Pero así no se cambia la opinión pública. Se cambia utilizando el lenguaje y estableciendo otro par de valores en el que aborto, píldora, etc. se unan a conceptos valorados negativamente por la sociedad (sin faltar a la verdad, eso si). Creo que el concepto al que hay que unirlos es “machismo”.

Machista es uno de los peores insultos que te pueden hacer en esta sociedad. Mientras que feminista es un halago. Baste el ejemplo del Presidente de Gobierno que se define como feminista para ganar popularidad. Pues bien, efectivamente, todos los elementos de la cultura de la muerte son machistas. Especialmente los dos que vengo analizando: el aborto y la píldora del día siguiente.

En los dos se abusa del cuerpo de la mujer, amén del niño, pero no nos desviemos. ¿Por qué cuerpo de la mujer tiene que soportar un aborto o tomar la píldora para tranquilizar al hipotético padre o a la familia que presiona o a la sociedad que deja sola a la mujer? Evidentemente antes de cualquiera de esas dos intervenciones ha habido un varón que ahora o desaparece o presiona a la mujer para que ejerza esta violencia sobre su propio cuerpo mientras él espera, más o menos tranquilamente, a que pase la tormenta pero sin que su cuerpo sufra nada. El aborto y la píldora del día siguiente son actos machistas, de violencia sobre el cuerpo de la mujer. Igual que la llamada violencia de género.

Sé que es un razonamiento audaz, que quizá no va a ser muy bien comprendido, al que le falta el elemento fundamental de los derechos del niño. Pero no pretende agotar la cuestión, que ya está resuelta desde un punto de vista ético, sino que busca lanzar un mensaje que contrarreste la percepción social del aborto, de la píldora o de otros elementos de la cultura de la muerte.

Rafael Amo Usanos, sacerdote

7 comentarios

Pedroles
Pues no le falta razon, Padre Rafael. En realidad toda la "revolucion" sexual y consecuencias (promiscuidad, minusvaloracion del matrimonio, sexualizacin de todo, aborto socialmente aceptado, PDD, ...) son bastante machistas y van contra la mujer, que como demustra la realidad que vivimos es la que suele tener que cargar con las consecuencias. Ya se que en ocasiones la ujer vivia situacioes de opresion, pero no se puede justificar el mal con el mal. Ademas, ninguna de las cosas enumeradas anteriormente ha resuelto o esas situaciones. El unico "beneficiado" es el hombre, y solo ene l corto plazo. Lo unico que me preocupa es que tildarlo solo de machista carga otra culpa mas en el hombre, cuando no es solo suya, y deja a la mujer libre de responsabilidad (esto lo digo pensando en una percepcioon generalizada del mensaje).

Creo que hay muchos termnos que pueden acompanar al aborto como: egoista, insolidario, anti natural, violento, "machista" (con aclaracion), inhumano, etc.
20/05/09 4:57 PM
federico
La separación del acto sexual del matrimonio y de la procreación ha llevado siempre a considerar éste como un fin de toda relación entre sexos. Y sabemos que el varón posee, normalmente más actividad sexual que la hembra.
Algunos animales matan las crías concebidas por ellos mismos, con el fin de que la hembra esté de nuevo, lo antes posible, en celo. Algo de esto hay en el asunto del aborto. La mujer que se ocupa de los hijos, no tiene tiempo para satisfacer las necesidades de una sexualidad separada de uno de sus dos sentidos: la procreación: de aquí nace todo. Estoy de acuerdo conusted, el aborto y toda la concepción de la sexualidad de hoy son profundamente machistas.
20/05/09 7:13 PM
Flavia
Recordará que precisamente, en un blog suyo anterior, yo tildaba de machismo todo eso, porque dejaba caer la carga sobre el cuerpo de la mujer. No entiendo cómo no lo ven así algunas políticas, tan " avanzadas " ellas, porque para mí está clarísimo-
20/05/09 7:31 PM
rafael amo
En continuidad con lo que dice Pedroles,
Es cierto que se le pueden poner otros términos pero tienen que ser aquellos que en el lenguaje actual tengan connotación negativa. En este sentido me gusta insolidario. Seguro que entre todos se nos ocurren más
20/05/09 9:43 PM
Pues sí, estoy totalmente de acuerdo con este enfoque. Escribí ayer un comentario en la misma clave, y me alegra ver que son más voces las que se dan cuenta que esto no es sino un dominio pernicioso del más recalcitrante machismo. La dignidad y naturaleza de la mujer está siendo de nuevo dominada y esclavizada por una visión machista de la sociedad a la que llamamos progresista. En el fondo no se trata del derecho de la mujer a abortar y sufrir de por vida las consecuencias de ello, se trata del "derecho" del hombre a ejercer su dominio sobre ellas y después imponer su egoísmo irresponsable de sus actos. Insisto, si las mujeres exigieran leyes que responsabilizaran al hombre de sus actos veríamos como estos se pensaban mucho como y cuando hacer las cosas. Pero no, ellas tan contentas y engañadas, siguen dando placer al hombre que las domina y exige, sibilinamente, después marchar de rositas. Es necesario más que nunca, una reeducación del hombre para que la mujer recupere su dignidad perdida y progrese esta sociedad que retrocede a un machismo cavernícola.
21/05/09 9:44 AM
Miguel Serrano Cabeza
Su razonamiento está expuesto por extenso en el artículo "La sociedad homosexual: el feminismo como ideología" de Pío Moa Rodríguez. Fue publicado por primera vez en 1984 en la revista "Tanteos" del Ateneo de Madrid.

El artículo está recogido en las pp. 15-48 de libro "La sociedad homosexual y otros ensayos", Madrid: Criterio Libros, 2001

http://www.aciprensa.com/Familia/homosex-piomoa.htm

El libro, como no puede ser de otra manera en esta nuestra zaporrajoyesca Espanya, está agotado.

ADVENIAT REGNVM TVVM.
22/05/09 9:58 AM
Rafael Amo
Gracias por la bibliografía
22/05/09 4:15 PM

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