(Gaudium Press/InfoCatólica). El vicepostulador del proceso de Beatificación de Card. Stefan Wyszynski, P. Gabriel Bartoszewski, informó a la agencia polaca KAI que la junta médica de la Congregación para las Causas de los Santos aprobó en una reunión del 29 de noviembre de 2018 un posible milagro atribuido a la intercesión del Venerable Cardenal.
La junta médica analizó la curación de una niña tras haber pedido a Dios el milagro a través de la intercesión del Cardenal Wyszynski, ejemplo para San Juan Pablo II durante su apostolado en Polonia, y llegó a la conclusión de que se trata de un hecho inexplicable por causas naturales. «La decisión abrió el camino para un mayor trabajo final sobre el proceso. Ahora estamos esperando la próxima comisión, un comité de consultores de teólogos, cuya tarea es determinar si la curación de esta niña estaba relacionada con la oración a través del Siervo de Dios», expuso el P. Bartoszewski. «Esto ocurrirá en poco tiempo».
El religioso indicó que en un lapso de dos o tres meses después de la eventual aprobación del comité de teólogos, «habrá una reunión de Cardenales y Obispos, que ya emitirá un veredicto final para aprobar la curación». Este informe sería presentado al Pontífice, quien tiene la autoridad de certificar el milagro. «Esto significa el final del proceso. Por lo tanto, la forma directa de la Beatificación está abierta», agregó.
El Venerable Cardenal Stefan Wyszynski nació en Zuzela, Polonia, en 1901, creciendo durante la opresión del Imperio Ruso y formándose en el Seminario de Wloclawek. Fue ordenado sacerdote en 1924, tras lo cual llevó estudios de doctorado en Derecho Canónico y Ciencias Sociales en la Universidad Católica de Lublin. Era profesor en el Seminario cuando estalló la Segunda Mundial, cuando sirvió como capellán de un hospital de la resistencia. Al terminar la guerra, volvió al Seminario para realizar su restauración y fue nombrado Rector del mismo.
El 25 de marzo de 1946, el papa Pío XII lo nombró Obispo de Lublín y tras la muerte del Card. Hlond lo sucedió en la sede de la Arquidiócesis Metropolitana de Gniezno y Varsovia el 12 de noviembre de 1948. En este cargo prestó un notable servicio a la Iglesia bajo la opresión comunista, jugando un importante papel en la defensa de la libertad religiosa. En 1953 fue arrestado por su apoyo a la resistencia polaca y permaneció en prisión domiciliaria durante 3 años en varias poblaciones. El Papa San Juan Pablo II expresó que no hubiera llegado hasta el Pontificado sin haber contado con el ejemplo de fe y esperanza del purpurado.
El Cardenal Wyszynski preparó la trascendental visita de San Juan Pablo II a Polonia en 1979 y e l 13 de mayo de 1981, al tener noticia del intento de asesinato del Pontífice, ofreció a Dios su vida en lugar de la del Papa. El 28 de mayo de 1981 falleció a causa de un cáncer abdominal.
Ejemplo de fe para San Juan Pablo II
Tu fe y confianza en María pese a las persecuciones me ayudaron a ser Sucesor de Pedro, aseguró en 1978 San Juan Pablo II al Cardenal Stefan Wyszynski, en una carta dirigida a los católicos polacos que toma actualidad luego que este martes fueran reconocidas las virtudes heroicas del purpurado polaco.
La carta es del 23 de octubre de 1978 y en ella San Juan Pablo II se dirigió al entonces Cardenal Primado de Polonia, que sufrió cárcel y persecución por parte del régimen comunista.
«Permíteme que te diga sencillamente lo que siento. No estaría sobre la Cátedra de Pedro este Papa polaco que hoy, lleno de temor de Dios pero también de confianza, inicia un nuevo pontificado, si no hubiese sido por tu fe, que no se ha arredrado ante la cárcel y los sufrimientos», escribió Karol Wojtyla.
San Juan Pablo II le aseguró a su compatriota que no habría llegado a ser Papa «si no hubiese sido por tu heroica esperanza, tu ilimitada confianza en la Madre de la Iglesia. Si no hubiese existido (el santuario mariano de) Jasna Gora y todo el período que en la historia de la Iglesia en nuestra patria abarca tu ministerio de obispo y primado».
«No os olvidéis de rezar por mí en Jasna Gora y en todo el país, a fin de que este Papa, que es sangre de vuestra sangre y corazón de vuestros corazones, sirva bien a la Iglesia y al mundo en los difíciles tiempos que preceden al fin de este segundo milenio», concluyó en su misiva.
En junio de 1979 San Juan Pablo II visitó Polonia y en su discurso a los obispos dijo que «el Cardenal primado se ha convertido en la piedra clave particular. Piedra clave es la que sostiene el arco, la que refleja la fuerza de los fundamentos del edificio. El Cardenal primado manifiesta la fuerza del fundamento de la Iglesia que es Jesucristo. En esto consiste su fuerza».
«El Cardenal primado enseña, desde hace más de treinta años, que esta fuerza la debe a María, Madre de Cristo. Todos sabemos bien que gracias a María se puede hacer resplandecer la fuerza de aquel fundamento que es Cristo, y que se puede convertir eficazmente en piedra clave de la Iglesia».
Esto, continuó, «es lo que enseña la vida y el ministerio del primado de Polonia. Es él la piedra clave de la Iglesia de Varsovia y de toda la Iglesia de Polonia. En esto consiste la misión providencial que él desarrolla desde hace más de treinta años».
En mayo de 1981 San Juan Pablo II escribió otra carta, esta vez con dolor y esperanza por el reciente fallecimiento del Cardenal Wyszynski.
En esta misiva, el Pontífice volvió a resaltar la figura de su compatriota, que también fue su profesor en la universidad.
