Falleció el 4 de enero de 1982

Declarado Venerable Francisco Maximiano Valdés Subercaseaux, primer obispo de Osorno (Chile)

El religioso chileno Francisco Massimiano Valdés Subercaseaux, de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos murió en 1982 en Pucón y el pontífice reconoció que tenía «virtudes heroicas», primer paso hacia la santidad. La decisión del pontífice se produjo el viernes, tras un encuentro con el prefecto de la Congregación para la causa de los santos, el cardenal Angelo Amato.

(La Nacion/InfoCatólica) El capuchino Valdés Subercaseaux fue el primer obispo de Osorno. Nació en Santiago de Chile el 23 de septiembre de 1908. Es el segundo de cinco hijos de una familia muy cristiana. Estudió en el Colegio de San Ignacio. Siendo muy niño se enfermó y, desahuciado por los médicos, su madre lo llevó con mucha dificultad desde Santaigo a la lejana Misión de Río Bueno, para que lo viera el misionero capuchino y médico naturista P. Tadeo, famoso por sus métodos de hidroterapia de Knipe. Milagrosamente le hizo recuperar la salud.

Su padre era ingeniero, profesor de la U. Católica en la capital. Estaba en Roma, visitando a sus abuelos -embajadores en dicha ciudad- cuando sintió el llamado de Dios y entró en el Seminario Pío Latinoamericano. Acababa de terminar sus estudios y obtener su bachillerato. Él se quedó en Roma y su familia regresó a Chile. Su madre soñaba constantemente con que Francisco no estaba contento en dicho seminario, ya que su vocación era más secular. Efectivamente él mismo relata del giro que dio: «Y vino el último campanazo. Estábamos en el Pío Latinoamericano de vacaciones en Montenero, y en el ‘Observatore Romano’ leí un día la siguiente noticia: ‘Misiones de Araucanía Chile. Voraz incendio destruyó convento de San Francisco en Valdivia. Mueren carbonizados los padres Albuino y Eucario, misioneros capuchinos bávaros’. La sangre se detuvo en mis venas y quedé como enajenado. Un signo como este no podía quedar ya sin respuesta. Desfiló por mi mente una sucesión de escenas: el padre Tadeo devolviéndome la salud, el santo con el lobo de Gubbio pintado por mi madre; las acuarelas de S. Francisco del tío Pedro, los mapuches de Purén... Hablé ese mismo día con mi director espiritual. Y decidí definitivamente mi vocación, resuelto a realizarla: franciscano, capuchino, misionero de Araucanía».

Así se dirigió a los capuchinos de Baviera para ser enviado posteriormente a la misión de Araucanía. Estudió teología en Venecia donde se ordenó sacerdote el 17 de marzo de 1934, convirtiéndose en el primer chileno que profesó como Capuchino. A fines de ese año fue enviado desde Baviera a la Araucanía.

Llevó una vida de penitencia. Optó por la pobreza en forma radical, comía y dormía muy poco y muchas veces se encontraron en su cama ramas de zarzamora o de rosas que le producían heridas sangrantes.

Fue Profesor de Filosofía en el Seminario de San José de la Mariquina. En 1943 fue designado Párroco Misionero de Pucón, donde vivió la pobreza franciscana y creó el hospital, el monasterio de capuchinas contemplativas, muchas capillas y otras tantas escuelas.

En 1959, uno de los más fuertes terremotos en Chile destruye seis provincias del sur. El Obispo Valdés dedica todas sus energías a colaborar en la reconstrucción de ciudades, pueblos y aldeas, dando apoyo espiritual y material a los damnificados. Construye también una nueva Iglesia Catedral, la que consagra en 1977.

En su libro novelado, «Lemunantü» -que significa Luz del Bosque- relata la historia de la evangelización mapuche y de la misión de este pueblo desde sus comienzos. Es un relato autobiográfico y él mismo aparece camuflado en la persona del agrimensor del territorio mapuche, que se convierte en uno de los misioneros capuchinos, el padre Gottlieb.

En 1979, aquejado de una seria afección al corazón, partió a Santiago y luego a Punta de Tralca. En 1981 apareció un tumor gástrico y fue desahuciado por los médicos.

Dejó Osorno en manos del Vicario General y se retiró a Pucón, dónde se había iniciado. Falleció el 4 de enero de 1982 en el mismo hospital que fundó. La gente, conmovida, iba a rezar a su tumba y le pedían al obispo su beatificación. Sus restos descansan en la cripta de la Catedral de Osorno, bajo el altar mayor.

12 comentarios

Francisco Javier
Los mismos dirán lo de siempre: "Que el hábito no hace al monje bla bla bla".

Pero que extraordinariamente fuerte y sobrenatural me parece ver el aspecto de este Venerable.
10/11/14 9:47 AM
Jorge (Chile)
Cuánto bien hará este silencioso "terremoto" a la Iglesia en Chile, especialmente a sus Obispos.

El legado del Venerable Obispo Francisco Valdés ha sido no pocas veces despreciado por, en el sentir de no pocos, "encarnar un tipo de santidad superado", llegando incluso a ser silenciado. No deja, por tanto de ser elocuente que al momento del anuncio de la decisión del Romano Pontífice, el sitio web de la diócesis de Osorno se encontraba, y aún lo está, suspendido.

Hasta que el Señor se ha manifestado.

Finalmente, cabe señalar que sorprendido por la rapidez de la decisión del Papa en aprobar las virtudes heroicas de Mons Vladés se ha declarado el Vicepostulador de la Causa (cf. www.australosorno.cl/impresa/nueva/2014/11/10/full/6/).
10/11/14 10:57 AM
Alejandro
Jorge:

No te pienses mal. Soy de Osorno. La página Web de la diócesis no es buena y nunca está actualizada. Además, ahora Osorno ahora está sin obispo. A su cargo está un arzobispo de una ciudad distante a 500 km. en calidad de administrador apostólico. En todo caso en Osorno, Mons. Valdés es muy querido venerado, cada vez más. Sus sucesores han difundido su figura y legado a través de diversas iniciativas.
10/11/14 1:28 PM
Jorge (Chile)
Alejandro:

Muchas gracias por su aclaración. Con todo, pienso que cabe apreciar lo que he expresado en lo que corresponda.

Qué bueno es saber que Mons Valdés es venerado por los osorninos. Con seguridad ésa es la causa de la pronta decisión del Papa de aprobar la heroicidad de sus virtudes.

¿Sabe Ud. dónde pueden conseguirse estampas con la oración al Venerable Francisco Valdés?
10/11/14 3:21 PM
¡Qué emocionante relato de la vida de este obispo!¡Ojalá pronto lo canonicen!.
Todos los santos tienen en común que llevan una vida de penitencia.
Gracias a Dios por darnos personas que son ejemplo de vida para nosotros.
10/11/14 4:29 PM
María de los Ángeles
Perdón, no me percaté de que no había puesto mi nombre; el anterior comentario es mío.
10/11/14 5:21 PM
JOSE GONZALO CASTELLON COVARRUBIAS
BENDITO SEA DIOS en sus Santos y en sus hijos....
Obispo Francisco, Ruega por nosotros.-
10/11/14 7:52 PM
Gregory
El llamado del Señor es un tesoro en una vasija de barro que se ha de llevar con alegría y con dedicación.
11/11/14 12:31 AM
Alejandro
Jorge: En la Catedral de Osorno hay siempre a disposición de los fieles, tanto en la entrada del templo como en la cripta donde está la tumba de Mons. Valdés.
11/11/14 5:54 PM
orfelina barria
Podrán decir lo que quieran , pero los Santos existen, son de carne y hueso, viviendo la misma vida de tantos, pero de forma diferente , por que dejan su vida en las manos de Dios, y se entregan por entero por amor , reflejando ese amor en las personas. Tremendo regalo el haber conocido a este gran hombre. Bendito sea Dios por su vida,por su trabajo sin descanso que se encarnó en las vidas de tantas gentes de este sur que el tanto amaba.
.
5/12/14 1:47 PM
mirta
me alegra mucho la noticia,espero que lo canocnicen pronto y se promulge la noticia.
12/12/14 6:23 PM
Lucia
Conocí este santo sacerdote en 1980 en Argentina, en una pequeña ciudadela llamada " MARIAPOLIS ANDREA" un sacerdote q irradiaba amor, descalzo y con una barba larga muy blanca,amigo de mi sacerdote en Chile ,otro santo sacerdote Rdo. padre FELIX EICHER hoy ya los dos disfrutando y contemplando a nuestro padre celestial...Dos grandes sacerdote q han delgado huella en cada persona q pasó por su lado
15/03/17 3:35 AM

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