La misma que en los últimos 3 años

Se mantiene la aportación del Estado español a la Iglesia como adelanto a lo que se recaude

El Estado entregará mensualmente a la Iglesia Católica 13,26 millones de euros durante 2015 (159,2 millones anuales), como adelanto de 0,7 % de la cuota íntegra del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de los contribuyentes que marquen la casilla de la Iglesia en la declaración de la renta. Así lo refleja una disposición adicional delproyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año 2015.

(Agencias/InfoCatólica) Según la citada disposición adicional relativa a la «revisión del sistema de asignación tributaria a la Iglesia Católica», los 13,26 millones que se le entregarán mensualmente son a cuenta de la cantidad que el Estado debe asignarle por aplicación de otra disposición adicional, en este caso de los presupuestos de 2007.

Aportación voluntaria del contribuyente

En las cuentas de 2007 el Gobierno fijó que, desde el 1 de enero de ese año y «con carácter indefinido» y en desarrollo del Acuerdo entre el Estado Español y la Santa Sede sobre Asuntos Económicos (que data de 1979), el Estado destinaría al sostenimiento de la Iglesia Católica el 0,7 % de la cuota íntegra del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) de los contribuyentes que manifiesten su voluntad en tal sentido.

Según el proyecto de ley de los presupuestos de 2015 entregados este martes en el Congreso de los Diputados, antes del 30 de noviembre de 2016 se efectuará una liquidación provisional de la asignación correspondiente a 2015, y la liquidación definitiva se realizará antes del 30 de abril de 2017.

En ambas liquidaciones, una vez efectuadas, se procederá por las dos partes a regularizar, en un sentido o en otro, el saldo existente, finaliza el texto.

El Estado abonará a la Iglesia la misma cantidad mensual que en 2012, 2013 y 2014.

3 comentarios

Pepito
Este es el dinero mejor invertido de todo el que recauda el Estado. Dinero que se emplea en gran parte en dar de comer a los hambrientos, vestir a los desnudos, pagar la luz y el agua a los desahuciados, etc.

Lo mejor que podría hacer el Estado es dejar a la Iglesia que invirtiese el dinero de nuestros impuestos. El dinero que se recauda de los fieles católicos debe de gastarse católicamente, y no en pagar abortos, juergas del orgullo gay, campañas de educación perversa de la infancia y juventud y otras lindezas anticatólicas.

Deberíamos exigir a nuestros gobernantes que invirtiesen el presupuesto de manera concorde con la Fe, a fin de construir el Reino de Cristo y no la inmunda pocilga de Satanás en la que estamos malviviendo.
1/10/14 11:22 AM
Tomás Bertrán
O sea, que del 2016 al 2017 en que el Estado no liquidará definitivamente lo que corresponde al 2015, el Estado se embolsará los intereses correspondientes.;(
Cuando se hace la declaración de Hacienda por los particulares (que somos nosotros), un año después, al Estado le interesa que salga a devolver, ya que durante un año han disfrutado de nuestro dinero y al final se quedan con los intereses retenidos, ya que cuando devuelven lo hacen sin intereses.
Bien por el papá Estado. Con un papá así es mejor quedarse huérfano.
1/10/14 12:07 PM
Manuel Fernández
Sr. Pepito, ¿de verdad usted se imagina al ministro de Hacienda manifestando como usted: "El Gobierno ha planificado los presentes presupuestos de manera concorde con la Fe, a fin de construir el Reino de Cristo"?
¿Qué pensarían los ajenos, los libremente indiferentes a toda religión? ¿Qué pensaría usted si donde dice Cristo dijese Alá?

De verdad, sr. Pepito, rentabilice usted mejor su ardor espiritual. Dedíquelo a los pobres, por ejemplo.
2/10/14 9:52 AM

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