El Papa advierte a los seminaristas que no se preparan para una profesión sino para ser pastores

Me pregunto si ciertos pastores de la Iglesia tomarán buena nota de estas palabras del Papa, y sobre todo, y lo que es aún mucho más importante, si les servirán para hacer propósito de enmienda de ahora en adelante.

Bien dicho Papa Francisco. Lo que se busca es calidad y no cantidad. La vocación no es un refugio sino un llamado de Dios al corazón.

Seria bueno que el Sumo Pontífice revisara la forma en que los formadores de seminarios guían a los seminaristas, donde algunos buscan perfección académica y dejan de lado el rendimiento pastoral como puede ser el caso de cierto seminario de Colombia.

San Vicente de Paul, en sus primeros tiempos vivió el sacerdocio como una profesión, pero Dios tocó su corazón y lo transformó.

¿Entonces esto es admitir que hay sacerdontes que nunca tuvieron vocación?
¿Qué es exactamente el sacerdocio como profesión, el que se hace por estar en una nómina?
¿Y en qué consiste esa mediocridad que termina siempre por usar al santo pueblo de Dios para su propio beneficio, es que la mediocridad es la herejía?
A mí, que alguien me lo explique porque no lo entiendo.

Si le preguntas a cualquier seminarista se cosidera que ser sacerdote es una profesión tengan seguro que su respuesta es un no rotundo y sonoro. Sin embargo hay que tener en cuenta que en el ejercicio de su ministerio el sacerdote debe tener cuidado de ritualizar lo que se hace ante la necesidad de asumir diversas tareas terminemos priorizando las labores de oficina por encima de la pastoral. La persona cree que por tener en orden los papeles de la curia es suficiente y descuida su vida pastoral y de ahi las espirituales no hay más que un paso. Pienso que el asunto no es si tiene o no vocación sino si en verdad estamos haciendo lo que es esencial y fundamental en la vida de todo sacerdote: ser sacerdote ser pastor.

¿Entonces esto es admitir que hay sacerdotes que nunca tuvieron vocación?
– Sí, los hay.
¿Qué es exactamente el sacerdocio como profesión, el que se hace por estar en una nómina?
-El que se usa para hacer ‘carrerismo’ en beneficio de sus ideas. Ideas que son impuestas aunque no puedan ser entendidas. La libertad del ser humano es aplastada, te dicen: no lo entiendes, te aguantas y te callas.
¿Y en qué consiste esa mediocridad que termina siempre por usar al santo pueblo de Dios para su propio beneficio, …
-Consiste en exhibir a las personas en reuniones o ‘certámenes’ muy concurridos, pero siempre de las mismas personas, para que reciban premios a cambio de prebendas para el grupo de pertenencia.
…. es que la mediocridad es la herejía?
-Si un aspirante a sacerdote no puede sacar conclusiones de “¿Cómo es posible esto?”. Quizás tenga que observar la pequeñez pero no mediocridad, del Santo Padre que es lo que le hace tener grandeza y claridad.

Insisto en que se puede perder el rumbo, el carrerismo es un ejemplo ahora la conversión consiste en darse cuenta de que todo se ha volcado en la busqueda de una posición y no en el servicio.

Sabias palabras del Papa Francisco. La falta de vocación es uno de los peores males que aquejan a la Iglesia, la falta de vocación conduce directamente a la herejía.

Por supuesto que pueden existir y han existido seminaristas sin vocación, así como mujeres que se van al convento porque el novio las dejó. Si los seminarios o monasterios son 'intensos', pueden 'sintonizar' a los aspirantes y hacerlos reflexionar sobre su error.
También puede ser que pierdan el rumbo, después de una verdadera vocación, quienes empiezan a ser poco estrictos con sus normas. La cizaña busca los plantíos del Señor, para arruinarlos. El demonio NO ceja, siempre está listo.
Sería saludable que algunos ministros 'católicos' tuvieran un curso de 'regularización'.