40 Días por la Vida

La Campaña de Cuaresma a favor de la vida logra salvar del aborto a 541 niños no nacidos en EE.UU y otros países de Occidente

Éxito absoluto de «40 Días por la Vida», la Campaña de Cuaresma a favor de la vida celebrada en EE.UU y otros países de Occiente (p.e España, Croacia y Francia) desde el pasado Miércoles de Ceniza hasta ayer, Domingo de Ramos. 541 mujeres que iban a abortar se arrepintieron gracias a la presencia de grupos de fieles que rezaban ante clínicas abortistas.

(InfoCatólica) Los grupos de oración actuaron en las inmediaciones de doscientas cincuenta y tres clínicas abortistas. Por medio de los conocidos como «consejos de acera» convencieron a más de medio millar de mujeres para que siguieran adelante con sus embarazos.

La Campaña, conocida como «40 Días por la Vida», se celebró por primera vez en Estados Unidos y poco a poco va extendiéndose a otros países de Occidente.

Este año han participado más de dos mil fieles y además se han celebrado 164 misas a favor de la vida.

3 comentarios

hidaspes
¡Gracias, Señor, por esas 541 personas que, sin duda alguna, contribuirán a hacer de este mundo un lugar mejor! Gracias a los que rezaron, y sobre todo, gracias a esas 541 madres, auténticas heroinas, que supieron resistir a la coacción abortist. Sus hijos serán la viva prueba de que Dios estuvo a su lado.
14/04/14 11:22 AM
María de Córdoba (Argentina)
¡Qué enorme es el poder de la oración! ¿Cuándo vamos a creerle al Señor? ¿Cuándo vamos a creer en Sus Promesas? Jamás ha dejado ni dejará de cumplirlas, porque son eternas como Aquel que las pronunció.

¿Qué pasa con Uds, queridos Pastores? ¿es que dejaron de creer? ¿es que dudan de la Bondad de Dios, o de su Poder? ¿qué sucede con nuestros sacerdotes y religiosas? ¿y los movimientos de laicos? ¿por qué duermen? ¿por qué pierden tiempo en cosas superficiales y mundanas, mientras millones son asesinados en el vientre de sus madres? Hagan que a nuestras comunidades, a nuestros Templos vuelva la Piedad y la Oración ferviente en defensa de la vida, de la Familia, de la Patria. Clamemos al Cielo, que El Señor no es sordo.

Hagámosle un perseverante "cacerolazo" de amor y oración al Señor, Rosario en mano, de rodillas ante todos los Sagrarios, ante Dios Nuestro Señor presente en el Santísimo. Y que se extienda como reguero por toda la tierra.

¿Por qué han de vencernos nuestros enemigos si tenemos a Dios de nuestro lado? ¿Por qué tantan vidas son día a día arrebatadas, pudiendo con nuestro clamor evitarlo?

Que toda la Iglesia se sume a esta lucha, con la acción y la oración: por la vida, para que el aborto sea abolido, para que las leyes inicuas contra la vida y la familia no triunfen, para que los niños que están en peligro de ser abortados puedan ver la luz del sol y sean recibidos con amor, para que cada mamá tenga el valor y los medios necesarios para decirle sí a la
14/04/14 2:43 PM
Mª del Pilar Martín Abad
María de Córdoba en Argentina, suscribo absolutamente todo lo que has dicho en tu comentario.

¿Por qué nos dejamos amilanar por los malos, teniendo en cuenta que los buenos tenemos a Dios de nuestro lado?

¡ADELANTE! recemos, recemos y recemos, que Dios no está sordo.Recemos para salvar cada día a más niñitos indefensos en el vientre de sus madres. Así sea

Gracias, María de Córdoba, (Argentina)
22/04/14 5:30 PM

Dejar un comentario



Los comentarios están limitados a 1.500 caracteres. Faltan caracteres.

No se aceptan los comentarios ajenos al tema, sin sentido, repetidos o que contengan publicidad o spam. Tampoco comentarios insultantes, blasfemos o que inciten a la violencia, discriminación o a cualesquiera otros actos contrarios a la legislación española, así como aquéllos que contengan ataques o insultos a los otros comentaristas, a los bloggers o al Director.

Los comentarios no reflejan la opinión de InfoCatólica, sino la de los comentaristas. InfoCatólica se reserva el derecho a eliminar los comentarios que considere que no se ajusten a estas normas.

Los comentarios aparecerán tras una validación manual previa, lo que puede demorar su aparición.