El obispo de San Sebastián reclama respeto para la asignatura

Mons. Munilla pide al gobierno vasco que garantice el derecho de los padres a que sus hijos estudien religión

El Obispo de San Sebastián ha pedido hoy a las instituciones que adopten las medidas necesarias para que los padres que así lo deseen, puedan inscribir a sus hijos en clase de religión. En este sentido, D. José Ignacio Munilla ha reclamado al Gobierno Vasco que articule y ponga en marcha los medios para que el próximo curso se pueda aplicar la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia del país Vasco que, obliga a todos los centros de Euskadi a ofrecer Religión y la asignatura alternativa a esta materia.

(Diócesis de San Sebastián/InfoCatólica) «Estamos ante una oportunidad única de normalizar las clases de religión en Euskadi», ha dicho el obispo, y se ha referido a la situación del resto de los países de Europa donde la religión católica se imparte sin problemas.

El prelado donostiarra ha querido dejar claro que «la Iglesia no se inmiscuye ni quiere hacerlo, en el ámbito de las instituciones» sino que «solo pretende defender el derecho de los padres a garantizar una formación católica para sus hijos». En este sentido, a hecho un llamamiento a toda la sociedad para «que se desprenda del trasnochado anticlericalismo que nos separa de la realidad» y ha pedido «respeto para quienes optan por la religión católica». Al Gobierno Vasco le ha reclamado que supervise y en su caso tome las medidas oportunas para evitar las conculcaciones que se están haciendo en algunos centros del derecho de los padres a elegir esta materia.

Junto con el Obispo de San Sebastián, han comparecido Sara Iragorri, profesora de religión, quien ha puesto en valor la importancia de la asignatura, «como parte vital de la educación integral de los niños y jóvenes, y como referente de nuestra historia, cultura, arte y pensamiento».

Así mismo, los miembros de la asociación de padres ANITZAK, Iñaki Bengoetxea y Marian Luna han subrayado que la clase de religión es «un derecho de los padres recogido y garantizado por la Constitución» han pedido al Estado que garantice este derecho. Así mismo han denunciado conculcaciones a este derecho en numerosos centros, y también han querido dejar patente la campaña de desprestigio injusta que movimientos laicistas están llevando a cabo contra las clases de religión. Los padres de ANITZAK han subrayado que «todos los centros tienen la obligación de ofertar religión y que los padres pueden y deben exigirlo».

 

4 comentarios

Mi-Ka-El
Hay que cumplir escrupulosamente el concordato vigente con la Iglesia Católica Romana. Tiene razón el obispo.
3/06/13 4:34 PM
Faramir
Bien por monseñor Munilla.

Recuerdo que hace años el Gobierno vasco se negó a hacer festivo el día de la Inmaculada, para no imitar al Gobierno 'de Madrid'. Tanto Setién como los demás obispos, creo que Larrea y Larrauri, callaron como (XXXXXX).

La mayúscula de Gobierno Vasco sobra. En español los gentilicios no llevan mayúsculas. No caigamos en los trucos nazionalistas para parecer más importantes de lo que son.
3/06/13 5:16 PM
Josu
La constitución de 1978 garantiza el derecho de padres y madres para que sus hijos "reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones". Eso es un hecho innegable, inseparable del derecho a la libertad religiosa que, al tratarse de personas menores de edad, pueden y deben ejercer padres y/o tutores.

Ahora bien, ese derecho no significa que se deba efectuarse a través de la escuela pública. Cuando se separa a alumnos que asisten a Religión Católica de otros alumnos que no, se está discriminando personas en el ámbito público. Además, el hecho de que algunos estudien religión, obliga a los demás a estudiar otra asignatura, con lo que su rendimiento escolar puede disminuir. Y, para el colmo, si la religión es una asignatura evaluable y contable para becas, medias, etc. se está dando poder a una jerarquía sin control (obispos y demás) para lograr que su programa entre fácilmente en las mentes de los niños.

La libertad religiosa de los padres católicos bien puede desarrolarse en las parroquias o demás grupos religiosos, sin que eso implique un gasto material y personal educativo en adoctrinar estudiantes de colegios públicos. Si no, si la administración debe ser la que pague salarios a profesores de religión, que sea también la propia administración (a traves de oposición u otros métodos) la que seleccione los profesores más idóneos, en vez de los párrocos o obispos.
3/06/13 11:00 PM
Cornelius
Como decía Dostoyevski, "si Dios no existe todo está permitido" y así son los colegios e institutos, "ciudad sin ley". Al haber expulsado a Dios de la escuela, la convivencia es imposible. El aula es "territorio comanche". Pobres profes. Recemos por ellos.
4/06/13 1:38 PM

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