(Efe/InfoCatólica) "Ese es el objetivo de la Jornada Mundial de la Oración", que se celebraba ayer, agregó el Papa.
El Santo Padre explicó que "el Señor llama siempre pero nosotros no escuchamos. Estamos distraídos por muchas cosas, por otras voces superficiales y, además, tenemos miedo de escuchar la voz del Señor porque pensamos que puede quitarnos nuestra libertad".
Benedicto XVI señaló que "los jóvenes que hoy fueron ordenados sacerdotes no son diferentes de otros jóvenes, sino que han sido tocados profundamente por la belleza y el amor de Dios y no han podido hacer otras cosa que responder con toda su vida".
"Recemos por la Iglesia, por todas las comunidades locales, para que sean como un jardín regado en el que puedan germinar y madurar todas las semillas de vocación que Dios esparce con abundancia", agregó el papa.
En los saludos a los peregrinos de lengua española, el Pontífice recordó que en el Evangelio de este domingo, Cristo se presenta como el Buen Pastor, "que da la vida por las ovejas".
"Pidámosle que conceda a su Iglesia abundantes vocaciones sacerdotales, religiosas y misioneras, que ayuden a sus hermanos a acoger su mensaje de salvación", concluyó.